Cada que hay una conferencia de Apple pasa lo mismo, ya no queremos el teléfono anterior y todo el mundo quiere el nuevo.

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Pero en esta ocasión a Apple le costó caro el juego. En 2018 todos queremos el iPhone X y no el iPhone 8. Porque siempre queremos el último iPhone y el mejor.

Esto lo vieron también los inversionistas que desde el 19 de octubre comenzaron a desconfiar del «sucesor» del iPhone, que en regla, es el iPhone 8 y el iPhone 8 Plus, y no el Iphone X.

El 19 de octubre las acciones de iPhone cayeron 1.5% debido a que todos temen que nadie compre ambos teléfonos.

Incluso la misma compañía los sabe, de acuerdo con Economic Daily News recortó los pedidos para noviembre y diciembre de ambos modelos en 50%.

También los analistas lo saben. De hecho creen que Apple se centrará más en el iPhone X (el que todos queremos), que tendrá un precio de 999 dólares y le daría, según ellos, un impulso a la compañía.

Pero al parecer, el mercado sigue desconfiando de la estrategia de Apple con este teléfono, por que las acciones no han dejado de caer desde ese entonces.

Al día de hoy, lunes 23 de octubre, las acciones de Apple disminuyeron (0.08) para quedar al precio de 156 dólares con 17 centavos.

«El iPhone anémico»

El iPhone 8 no sólo no superará al iPhone del décimo aniversario, tampoco lo hará con su predecesor.

Resulta que analistas en el mercado también encontraron que el iPhone 8 y el 8 Plus no puede superar, ni siquiera acercarse, a los resultados de las primeras semanas del iPhone 7 y 7 Plus en 2016.

Eso no es todo, mientras que iOS 11 te arruina la vida, Apple confirmó que las embarcaciones del iPhone 8 serán reducidas en un 50% debido a «un apetito anémico por el iPhone 8».

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