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Musicalmente Hablando con… David Otero

Musicalmente Hablando con… David Otero

CDMX, México.- David Otero se «ha comido» a El Pescao y lo ha «enterrado» en su nuevo disco, el primero que el exintegrante de El Canto del Loco publica con su propio nombre y con el que rompe las barreras que no le permitían «ser él mismo».

El primo de Dani Martín empezó a cocinar lo que sería su futuro artístico una vez que la formación pusiera su punto y final. Años más tarde, y después de dos discos en solitario, Otero ha decidido continuar con su carrera musical liberándose de la etiqueta para mostrar su faceta más personal. «David Otero» es el nombre del tercer disco del cantante que apuesta ahora por una nueva etapa en la que el mote artístico de El Pescao ha pasado a mejor vida.

El español cantará en México hoy, 28 de junio, cuando en el Lunario del Auditorio Nacional comparta sus canciones en el marco de su tour homónimo que incluye la presentación de su tercer disco y sencillo.



DigitAll Post – Musicalmente Hablando conversó con él previo a esta presentación y esto nos dijo.

Musicalmente Hablando (MH): Amigos, mi estimado David Otero quien llega justo ahora desde la Península Ibérica… Y, para dar concierto en México, justo en el Lunario para cantar un poco de tu nuevo disco que bautizaste con tu nombre.

David Otero (DO): Sí, Vengo para tocar como siempre, yo creo que nunca he venido a México si no es más que para tocar, a trabajar, a intentar que el miércoles 28 de junio, la gente se la pase super increíble, y ser «yo mismo» que es lo más importante al final ya que no soy una persona de pose o tener una imagen, aunque lo intente, todo lo que busco es ser «yo mismo» y esa es mi meta.

MH: Como decimos aquí… eres «neto», eres auténtico…



DO: Yo siempre he dicho que soy tímido y me escondo en cosas para no demostrar eso.

MH: A veces es bueno…

DO: Sí, pero yo creo que la música debe ser muy frontal y que te digan la verdad, si no la gente no logra engancharse.

MH: ¿Vas a presentar este disco que apenas promocionas?

DO: Voy a presentar este disco (David Otero), no todas las canciones del disco, voy a tocar seis y siempre dejo un ratito para que la gente pida canciones para que la gente no se quede con la sensación de que faltó alguna, voy a imprimir todas mis canciones y las repasaré un poco.

MH: ¿Dentro del repertorio estará «David y Goliat»?

DO: No, es un tema que nunca voy a tocar en directo jamás.

MH: ¿Por qué?

DO: Porque es un tema en el que no se puede cantar y respirar a la vez, tiene tanta letra que me cuesta mucho a veces interpretarla, pero lo que si hacemos es que la ponemos como tema final del concierto.

MH: ¿Cómo surge esta canción?

DO: Es una canción con un registro diferente a lo que suelo hacer, es como muy transparente y como con mucho misterio, porque deja claro cosas que pasan, pero sin embargo no te dice donde termina la historia, y surge en Buenos Aires y mucho antes de hacer el disco anterior «Ultramar», es una de las pocas canciones en las que primero hago la letra y luego la medimos.

La hice en una cafetería que se llama «Dulces confesiones» y no podía tener el nombre más acertado para ofrecer esa letra, es una canción que cuando la pongo al final la gente la canta, es una de las canciones que más la gente me pregunta.

MH: Pero en esta canción que hablamos de «David y Goliat» te desnudaste… Y ahí dices algo que llama la atención «Me gusta caminar por el lado de la vida, donde nadie me miente»… ¿Cuál es ese significado?

DO: Sí, totalmente. Y habla un poco por mi pasaje por la industria musical, para hacer música hay que hacer que a uno lo miren, que le presten atención, somos egocéntricos, somos demandantes.

Esta canción analiza y te quita todo lo que hemos aprendido de pequeños, los artistas van a un sitio y quieren que durante dos horas quieren que la gente lo esté mirándolos, es una demanda de atención gigante, y habla de la industria musical que me ha engañado mucho durante mis años de pertenecer a esa industria, por eso dice «Me gusta caminar por el lado de la vida, donde nadie me miente», eso es referente a mi «Yo» artístico.

MH: Es una contradicción de alguna forma.

DO: No lo sé, depende de lo que creas, ya que, si esperas que esas personas que tienes enfrente estarán hablando de ti en un concierto, es estar loco porque es mentira, simplemente hay que disfrutar ese momento, es parte de este juego.

MH: ¿Por qué te gustan los «de abajo» y no los «de arriba»?

DO: Porque me siento identificado con los «de abajo», estoy identificado con la gente que trabaja día a día, que está «Al pie del cañón», y siento que cuando me topo con gente de la «de arriba» no hay mucho que decirles. Yo siempre he considerado que estoy identificado con la gente normal.

MH: En la canción respetas las dos partes que vives y que es muy frecuente en tu ir y venir, que es la parte de arriba y la de abajo de un escenario, mismo que describes cuando expresas «Pero cuando llego a casa y me saco la ropa soy igual de idiota, que cualquier otro tío en pelotas», no dejas nada de lo que dejas arriba y abajo.

DO: Uno de debe sentir especial en el escenario si no debe de subirse, es algo especial, tú debes de conseguir que esas doscientas o más personas te vean, eres una especie de guía y si no tienes ese sentimiento la pasas mal, a todos nos pasa, yo creo que no hay artista que no lo haya vivido, es un momento que dura una o dos horas, por eso hay que disfrutarlo.

MH: ¿Es el equilibrio de lo que hablas?

DO: Así es, en esta vida vas para abajo o para arriba y es algo en lo que estoy consciente, estoy convencido de que, de aquí a dos años, habrá un éxito bestial, pero seguiré teniendo los pies sobre la tierra. Si no me pasó en la época con «El Canto», ya que me ayudó a meditar y evitar la influencia de la gente que no quería en mi camino.
MH: Una de las cosas que me gusta descubrir y más en la gente que escribe sus propias canciones es que por ejemplo este tema dentro del arreglo musical estuvo benéfico para no cantarlo en vivo.

DO: La primera versión era cantada y no quedó, por eso la hice recitada, no puedo decir que sea rapero, no creo que me encuentre cómodo al hacerla en directo, por todo lo que cuenta, le quedaría a otra persona, pero no, en lo particular no me atrevo, y lo he dicho no la cantaré nunca. Pero cantaremos muchas más, está por las dos razones que identificaste no la cantaré, pero ahí los espero y gracias por venir y siempre estar con nosotros. Los esperamos.