Las series de televisión han evolucionado de una manera muy radical, hoy en día es muy común ver series que al parecer no tienen ningún sentido, pero es todo lo contrario, ya que muchas de ellas tienen un sentido social o explican problemáticas que el mundo vive a diario.
Aquí una muestra de 8 series que tienen un sentido que no cualquiera identifica
1.- «Louie»
Louis C.K. es un comediante de stand-up que durante mucho tiempo luchó por llegar al éxito y ahora que lo tiene pasa la mayor parte del tiempo creando. Su serie «Louie» es semiautobiográfica y sirve como una exageración de su vida real. Su percepción oscura e hilarante forma de ver lo absurdo de los seres humanos queda plasmado en un estilo que nos recuerda a Woody Allen por cómo se sitúa la mayor parte del tiempo en Nueva York mientras de fondo suenan canciones de jazz que acompañan perfectamente las historias. Éstas tratan desde la forma en que vemos a la gente obesa, hasta cómo sería el mundo si alguien limpiara espontáneamente un charco sospechoso en el metro.
2.- «Community»
El proyecto que le dio fama al creador de «Rick and Morty». Community se estrenó en 2009 y aunque al principio parecía una comedia normal, eventualmente experimentó dentro de distintos géneros como la ciencia ficción, el drama, la acción y algunas variaciones de comedia dentro de la imaginación de sus personajes. Situada en una universidad comunitaria, los personajes son tan diversos (e incluso tan adentrados en la cultura popular) que cada episodio hace referencia a algo que ya es conocido para transformarlo. Sus ideas también se acercan a lo -meta- por lo que constantemente se nos recuerda que es un programa de televisión que hace una revisión de todo lo que llegó antes e influye en la sociedad moderna.
3.- «Arrested Development»
4.- «Spaced»
Antes de dirigir «Scott Pilgrim vs the World» y «Shaun of the Dead»Simon Pegg, Jessica Stevenson y Edgar Wright, crearon esta serie, que al igual que «Seinfeld» parece no tratar de nada. Inmediatamente posiciona a los dos protagonistas en un edificio extraño en donde deben fingir que son pareja para mantener su apartamento. Los vecinos son bastante peculiares y sus experiencias se hacen más delirantes, pero en verdad no lo son. La experimentación del director con los chistes visuales y técnicas que se usan constantemente en el cine comercial, la convierten en una serie de terror o acción con simples movimientos de cámara y un soundtrack sólido.
5.- «Party Down»
«Party Down» duró sólo 20 episodios pero sirvió como un escalón para distintos proyectos futuros de la mayoría de los involucrados. La serie trata de un grupo de personas que trabajan para un servicio de catering en fiestas de distintos tipos. Los personajes buscan la fama como actores o escritores y sus relaciones efímeras con distintas personas hacen que vean dentro de ellos mismos para lograr una evolución sutil que no tiene resultados. Lo más gracioso y trágico de la cinta es notar cómo a veces las vidas no cambian y ese sentimiento de que no se va a llegar a ningún lugar se mantiene constante.
6.- «The Thick of It» / «Veep»
El género de documental en las comedias de este tipo se popularizó a mediados de la primera década del siglo XXI y la transformación política en Inglaterra motivó a Armando Iannucci a crear «The Thick of It», serie que narra una crónica sobre los trabajadores del gobierno liberal en el país británico. Las interpretaciones son perfectas e hilarantes pues dejan expuesta la torpeza de los políticos y cómo los líderes de medios están encima de todos en una época donde cualquier error se puede viralizar. El diálogo y acercamiento a la política es astuto y gran parte del programa es improvisado, llevando a un nivel más grande la complejidad del programa.
7.- «Master of None»
Aziz Ansari, otro comediante de stand-up que -por su perspectiva de la vida «millenial»- logró crear «Master of None». Una serie inteligente que retrata puntualmente la cosmovisión de los jóvenes. La serie no sólo tiene una fotografía llamativa y apropiada para las historias, sino que su acercamiento cómico a problemas y pensamientos contemporáneos provoca una inevitable identificación por parte del espectador.
