Luis Manuel Gonzales es casi como cualquier bebé de 10 meses pero tiene una dramática diferencia que pone en riesgo su vida: pesa 28 kilos.
Luisito, que vive en Tecomán, Colima, en la costa del Pacífico mexicano, nació en diciembre de 2016 con un peso de 3,5 kilos y midió 52 centímetros, casi lo mismo que su hermano Mario, ahora por cumplir tres años.
Sin embargo, el desarrollo de ambos ha sido completamente diferente.