Cerca de 11 mil reos han salido de las cárceles de la Ciudad de México debido a reformas legales y al nuevo Sistema Penal Acusatorio, lo que ha llevado a que la capital del país enfrente una fuerte presión en seguridad pública, ya que muchos vuelven a delinquir.

Así lo señaló el jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, quien puntualizó que de los 39 mil 223 reclusos que en 2015 estaban en penales locales, se pasó a 28 mil 222 presos en los últimos días.

Calculó que de esos 11 mil que han regresado a las calles, alrededor de tres mil 500 son reos que cometieron robo con violencia, y se considera que una parte de ellos son los que han iniciado la actual ola de asaltos en la capital.

Indicó que una de las deficiencias de la Reforma Penal fue que se desapareció el agravante de violencia equiparada, por lo que ahora los asaltantes saben que si utilizan una arma réplica, recibirán una sanción menor.

También, que fue suprimida la figura de la cuasi flagrancia, por lo que ahora una persona no puede ser detenida después de una persecución o incluso su castigo es menor si porta un arma de manera ilegal.

Mancera señaló que ante este panorama se requieren más recursos para ayudar en materia de seguridad a las entidades y fortalecer a los cuerpos policiacos.

Recalcó que el tema toma tintes políticos, toda vez que desde febrero en la Cámara de Diputados se está congelando una iniciativa de ley para hacer más severo el robo con violencia cuando se utiliza un arma de fuego.

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