• Andrés Manuel López Obrador quiere privatizar el Nuevo Aeropuerto Internacional de México
• Jesús Zambrano, legislador del PRD, afirmó que «anda de ‘queda bien’ con quien platica».

INFORMACIÓN: Redacción     IMAGEN: Wikimedia

En un giro de 180º, Andrés Manuel López Obrador, candidato de la coalición Juntos haremos historia, ha manifestado su interés por privatizar el Nuevo Aeropuerto Internacional de México.

Esta postura ha desencadenado una serie de cuestionamientos en tres aspectos generales.

Primero, los críticos han expresado que una concesión significa que una empresa privada podría tener el derecho de explotar, usar o aprovechar un bien, que por su magnitud y relevancia, debe ser de dominio público.

En segundo lugar, señalan que el candidato morenista siempre ha expresado su rechazo de privatizar este tipo de proyectos, que son de uso público. En este sentido, Jesús Zambrano, legislador del PRD, afirmó que «anda de ‘queda bien’ con quien platica».

En tercer lugar, afirman que una concesión de este tipo es un beneficio para los más ricos, ya que la empresa que la obtenga recibirá todos las ganancias de su gestión. Además en un mercado libre, una entidad privada tiene el derecho de establecer las tarifas que considere necesarias para obtener ventaja económica.

López Obrador rebatió afirmando que, si bien el sector privado correría con todas las ganancias, también tendría que asumir los retos. Sin embargo, el hecho de que el NAIM sea una obra necesaria para resolver el problema de saturación del aeropuerto de la Ciudad de México, afluencia de viajeros está prácticamente garantizada y, en consecuencia también una utilidad mayor.

Los críticos también exponen que con el esquema actual de inversión, el Estado obtendrá un ingreso atractivo, ya que este será el aeropuerto más rentable de México.

 
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