DACA, Bangladés.- Una ola de calor provocó crisis de pánico y graves indisposiciones a los trabajadores de varias fábricas textiles en Bangladés, obligando a cerrar a casi una veintena de centros de producción, informó la policía.

Unas 18 fábricas textiles, que exportan ropa a tiendas occidentales, han sido cerradas desde el miércoles, en medio del caos provocado por el calor. Unos 30.000 trabajadores tuvieron que abandonar sus puestos en medio de la jornada laboral.

«El jueves 490 trabajadores enfermaron, y fueron llevados a hospitales. El miércoles los afectados fueron 365» dijo Shoeb Ahmed, responsable de policía con jurisdicción sobre la industria.

Ahmed afirmó que algunos trabajadores se desmayaron debido a las sofocantes temperaturas, lo que provocó crisis de «pánico» entre sus colegas, que abandonaron las fábricas.

Responsables policiales y de hospitales indican que los trabajadores estaban desnutridos y debilitados por la falta de sueño debido a las altas temperaturas.

La temperatura en la capital, Daca, alcanzó los 36 grados Celsius, pero si se tiene en cuenta la humedad reinante, la sensación térmica se acerca a los 51º C, según el sitio Accuweather.com.

Una ola de calor se ha extendido por las regiones central y sureña del país, según el departamento de meteorología.

Bangladés tiene más de 4.500 fábricas textiles, muchas de las cuales carecen de sistemas básicos de ventilación o refrigeración. Estas fábricas emplean a cuatro millones de personas, en su gran mayoría mujeres, por un sueldo mínimo de 68 dólares mensuales.

La industria adolece además de pobres medidas de seguridad. Hace cuatro años, en abril de 2013, se hundió un edificio que albergaba talleres de confección en las afueras de la capital, causando la muerte a 1.130 personas.

Bangladés es el segundo país exportador textil del mundo, después de China.

Con información de AFP.