La historia de extorsiones y maltrato a internos del penal Neza-Bordo no acabo con los dos trasladados de Luis ‘N’ alías “El Tatos”. Familiares de los presos torturados denuncian que estas acciones continúan encabezadas por “La Pelota”

Luis ‘N’, alías “El Tatos” fue trasladado en dos ocasiones en menos de dos meses, primero al penal de Chiconautla en Ecatepec y posteriormente fue llevado al penal de máxima seguridad de Gómez Palacio en Durango.

La banda que encabezaba ‘El Tatos”, ahora quedó a cargo de uno de sus cómplices, Alfredo de Jesús Martínez, alías “La Pelota” quien entre otras acciones ilícitas, controla el acceso de droga el centro penitenciario.

«Hay varias formas de seguir manejando la extorsión, ya sea dando dinero en efectivo a los mismos internos a los comandantes o en su caso pasando droga, ya sea desde pastillas hasta cocaína, piedra, mariguana o pasando armas. Si no es pasando droga, si no es pasando dinero, es accediendo a tener relaciones sexuales con él, quien está manejando esta situación es ‘La Pelota’ ”, indicó un familiar a Imagen Noticias con Ciro Gómez Leyva.

“La Pelota” quien permanece preso en el área de internos sentenciados y no en el área de Máxima Seguridad, no fue contemplado en el traslado de reos de alta peligrosidad como “El Tatos” y dos de sus cómplices.

«Que se lleven de traslado a ‘La Pelota’ porque llevándose a ‘La Pelota’ deja de haber droga en el penal, dejan de haber cosas, dejan de haber problemas. Ahí todo esto lo maneja él. Él es el que decide quién puede vender droga, quien puede fumarla, quien la puede introducir. Él es el que mueve esa situación allá adentro”, agregó el familiar.

Desde junio de este año, las víctimas de la banda de “El Tatos” denunciaron ante la Contraloría del penal que los estaban extorsionando e insistieron en que por su perfil delictivo esta banda debería de estar en un penal de Máxima Seguridad. Además, denunciaron que los reos trabajan en complicidad de los custodios.

Familiares de uno de los presos extorsionados hicieron llegar a imagen Noticias una carta en donde uno de los presos denuncia los maltratos de los que fue víctima junto con otros internos.

«El domingo nos golpearon, nos quemaron con agua hirviendo, nos picaron o trataron de hacerlo. Nos quedamos sin celular y sin cobijas. Hoy salí a llamarte y recibí otra golpiza. Iba esposado”, se lee en el documento.

La víctima le pide a su esposa que no conteste llamadas de números desconocidos y que denuncie telefónicamente las agresiones sin dar su nombre. Hasta ahora las víctimas de las extorsiones siguen siendo los familiares de los internos.

Vía Excélsior.

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