PARÍS.- A menos de tres meses de la primera vuelta para los comicios presidenciales, el miedo de apodera de las calles de Francia, tras el ataque en el Louvre, Marine Le Pen aprovecha la situación para posicionarse. «Es necesario tomar medida radicales contra este flagelo», advierte la líder del Frente Nacional en un comunicado.
La persona que atacó a policías en el museo del Louvre de París fue identificado como Abdallah E-H, tiene 29 años y llegó a Francia el 26 de enero en un vuelo procedente de Dubai, Emiratos Arabes Unidos. Al respecto, la líder del ultraderechista expresó su apoyo a los militares que se enfrentan «a la amenaza y la barbarie islamistas».
Le Pen es una de las favoritas en el primer turno electoral después de que cayera en picada la popularidad del candidato conservador François Fillon a raíz del escándalo conocido como «Penelopegate», que lo acusa de haberle dado un empleo ficticio a su esposa.
Conocida por su discurso contra la inmigración y el Islam, Le Pen manifestó su apoyo al controvertido decreto de Donald Trump, que prohíbe el ingreso a Estados Unidos de personas de siete países de mayoría musulmana. La dirigente ultraderechista apuntó contra la «inercia» de los actuales «responsables públicos» no obstante la «gravedad» de la alerta. Se trata de declaraciones que en el actual clima de miedo podrían contribuir ampliar su perspectiva electoral. Con un tono opuesto, el presidente francés, Francois Hollande, y sus ministros saludaron la eficacia del operativo antiterrorista.
También se sumó a elogiar a las fuerzas de seguridad el ministro de Economía, Emmanuel Macron, líder de ‘En Marche!’, quien según los últimos sondeos podría vérselas en el balotaje previsto para el 6 de mayo contra Le Pen. Por su parte, el ahora alicaído Fillon elogió la «sangre fría de los militares», aunque subrayó que «la amenaza terrorista no ha disminuido en nuestro país».
Por el contrario, a juicio de Fillon, «es omnipresente», aunque esta vez «el sistema de seguridad fue afortunadamente eficaz».
Mientras, el candidato socialista Benoit Hamon pidió un «dispositivo que permita localizar la amenaza lo más pronto posible». Para él, pese al éxito del plan con 7.000 soldados desplegados en todo el territorio, «hay necesidad de un sistema de inteligencia más eficaz».
Entrevistado en los meses pasados por la televisión belga RTBF, el ex juez antiterrorismo, Marc Trévidic, había advertido sobre el riesgo de los atentados durante la campaña presidencial. «Será un año aterrador hasta las elecciones. El intento del Estado Islámico de concentrarse en Francia a causa de esa cita será demasiado grande. Estamos en guerra en tiempo de paz», aseveró. «Mi única esperanza, a medio término, y pienso que lo lograremos, es la pérdida de vigencia del yihadismo. Pero antes de volver a respirar pueden pasar diez años», añadió.
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