MÉXICO.- El robo y la extorsión, son dos delitos que parece están lejos de ser erradicados… por lo menos en México. Cifras oficiales, indican que durante el mes de agosto, en las diferentes Procuradurías del país, se presentaron 48 mil 321 denuncias por robo.
Esta cifra, supera claramente las 43 mil 696 que se presentaron apenas, durante el mes de enero. En promedio en México, se producen alrededor de mil 500 asaltos al día.
Por lo que corresponde a la extorsión, el panorama es similar. En agosto se abrieron 486 averiguaciones previas, 117 más casos que los denunciados en enero de este año. Tamaulipas, de acuerdo con las autoridades, se ha eregido como la «capital» de este delito.
Isabel Miranda de Wallace, presidenta de Alto al Secuestro, señaló que el robo y la extorsión se mantienen extremadamente elevadas y reflejan que no hay un trabajo de campo en los lugares con alta incidencia.
De Tamaulipas sale prácticamente el 50 por ciento de las extorsiones telefónicas del país, del Distrito Federal sale otro 30 por ciento. Si de verdad tuvieran ganas de combatir esto pues lo primero que deberían hacer es poner inhibidores de señales en los Cefereso estatales», dijo.
En total, en los primeros ocho meses de este año se abrieron 367 mil 650 averiguaciones por robo en las Procuradurías y Fiscalías del país, un promedio de una cada minuto.
Según la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre la Seguridad Pública (Envipe), en todo 2015 se generaron 29.3 millones de delitos. De éstos, el 28.2 por ciento fue robo o asalto en la calle o a transportes públicos y el 24.2 por ciento, extorsión.
Martín Barrón Cruz, investigador del Instituto Nacional de Ciencias Penales (Inacipe), expresó que los índices delictivos a la alza son el reflejo de la ineficiencia de las autoridades.
«Hay una incapacidad para analizar las causas del delito. La incidencia delictiva no es sólo número, también hay causas», dijo.
Sobre la extorsión, Barrón también criticó que las cárceles sigan siendo la principal fuente de extorsiones telefónicas y continúen sin operar los inhibidores de telefonía celular.
Además, de acuerdo con la Envipe, sólo una mínima parte de las extorsiones se denuncia. Calcula que la «cifra negra» de ese delito fue del 98.4 por ciento.
jcrh