
BRASIL.- El expresidente brasileño Luiz Inacio Lula da Silva, fue acusado por la Fiscalía de Brasil de ser el «comandante máximo» de la red de corrupción de Petrobras.
La acusación contra quien gobernó Brasil entre 2003 y 2010, icono de la izquierda latinoamericana, cayó como una bomba en un país sacudido por la crisis económica y política, incluyendo la destitución de Dilma Rouusseff, la heredera política de Lula que le sucedió en el poder.
El abogado de Lula calificó las denuncias de «farsas», dijo que la Fiscalía carece de pruebas y, al igual que el Partido de los Trabajadores (PT, izquierda), ve tras los problemas judiciales del exmandatario un intento de sus enemigos de impedir que concurra a las elecciones presidenciales de 2018.
El jefe de los fiscales que investiga el caso, Deltan Dallagnol, afirmó el miércoles en una rueda de prensa en Paraná, que el exmandatario estaba en la cima del esquema que desvió miles de millones de dólares de la petrolera estatal, revelado por la Operación Lava Jato.
Sin el poder de decisión de Lula, ese esquema sería imposible», aseguró Dallagnol, al definir el caso -también conocido como ‘Petrolao’- como «el mayor escándalo de corrupción de la historia de Brasil».
Ahora el juez Sergio Moro, símbolo de la lucha contra la corrupción, deberá decidir si acepta la denuncia contra el exdirigente sindical, de 70 años, que encarnó la irrupción de la izquierda latinoamericana a inicios de la década pasada.
El «Petrolao» fue un sistema que operó durante una década en la estatal Petrobras, por el cual las mayores constructoras de Brasil sobornaban a ejecutivos de la compañía, que a su vez eran designados por partidos políticos, a cambio de contratos.
Las empresas sobrefacturaban las obras y el excedente generado era luego distribuido entre las agrupaciones para financiar sus campañas y entre los participantes para su enriquecimiento personal.
El escándalo fue el gran motor de las protestas contra el PT y el gobierno de la sucesora de Lula, Dilma Rousseff, que fue destituida el mes pasado acusada de maquillar las cuentas públicas, en un juicio político sin conexión con Petrobras, pero plagado de menciones a la trama.
con información de agencias
jcrh