CIUDAD DE MÉXICO,- Debido al estilo de vida y sedentarismo se advierte con frecuencia que los adultos jóvenes padezcan osteoartritis, enfartiza la especialista en Ciencias Genómicas, Gabriela Martínez Nava. Expresó a la Agencia Informativa del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología que alrededor del 10 por ciento de la población mexicana presenta esta enfermedad que afecta principalmente a personas mayores de 70 años.
“Tenemos personas de 20 o 30 años con un grado moderado de osteoartritis; entre mayor sea el índice de masa corporal más peso soportan las rodillas”, añadió. La experta explicó que “cuando uno sobrepasa este peso, el cartílago se somete a un estrés biomecánico mayor, lo que generará más desgaste y la aparición de esta afección a edades más tempranas”.
Subrayó que la osteoartritis se manifiesta, de manera recurrente, con dolor en alguna articulación; un simple malestar en la rodilla al hacer ejercicio, al caminar y subir o bajar escalones podría indicar el inicio de este padecimiento.
“Llega un punto en que el dolor es insoportable y cuesta trabajo flexionar, es ahí cuando se busca la atención médica”, resaltó.
Este padecimiento en las articulaciones se caracteriza por un desgaste del cartílago articular, un tejido que se compone por 90 por ciento de agua. Solo 2.0 por ciento es constituido por condrocitos. “El cartílago que se mantiene por estos condrocitos se desgasta, el hueso empieza a rozar con otro y esto es lo que causa el dolor. No solo se pierde el cartílago, también se forma hueso donde no debería”, refirió.
Asimismo, la experta en Ciencias Genómicas apuntó que actualmente, en el Laboratorio de Líquido Sinovial del Instituto Nacional de Rehabilitación Luis Guillermo Ibarra Ibarra (INR) estudian los factores de riesgo asociados con una mayor probabilidad de presentar osteoartritis.
La investigadora ha identificado dos alteraciones en el gen AKNA en pacientes con osteoartritis de rodilla. Mencionó que las personas que portan estas variantes genéticas pueden tener hasta dos veces más posibilidades de tener esta afección, en comparación con aquellas que no tienen la mutación.
“El gen AKNA regula dos moléculas coestimuladoras de la respuesta inmune. En una investigación encontré que dos polimorfismos que codifican en la región están más presentes en los pacientes con osteoartritis que en sujetos sanos”, expresó. De acuerdo con la experta, la osteoartritis es una enfermedad compleja en la que intervienen diversos factores para su desarrollo como son el peso, hábitos alimenticios, género (más frecuente en mujeres) y ocupación, entre otros.
Asimismo, indicó que la genética juega un papel muy importante. “hay varios sitios en el genoma humano que están asociados con un mayor riesgo de desarrollar osteoartritis, por ejemplo, el gen que codifica para la colágena tipo dos, el componente principal del cartílago articular”, explicó.
“Deseamos estudiar este gen en otras enfermedades musculoesqueléticas, pensamos que tiene un papel en la artritis reumatoide. Creemos que el estudio de AKNA pudiera darnos información importante tanto para el diagnóstico, desarrollo y pronóstico de padecimientos”, comentó.
Con estos estudios de epidemiología genética, el grupo de investigación del INR también pretende describir factores de riesgo en las afecciones musculoesqueléticas en la población mexicana.
Los investigadores mexicanos Vicente Madrid Marina y Héctor Martínez Valdez describieron por primera vez el gen AKNA que se asocia con cuatro patologías: cáncer cervicouterino, resistencia a quimioterapia en leucemia, síndrome de Vogt-Koyanagi-Harada y osteoartritis.
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