BUENOS AIRES, ARGENTINA.- Alejandro Domínguez, presidente de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol), dio a conocer que cuando asumió el cargo en enero pasado, se encontró con que este agrupamiento era un feudo personal que le hizo mal al deporte y cuyo objetivo era el dinero.

«Más que una institución, lo que encontramos fue un feudo personal, que no rendía cuentas a nadie y se dedicada a extraer valor en lugar de generar valor», dijo Domínguez, quien asumió el cargo en enero de este año para suceder a su encarcelado compatriota Juan Ángel Napout.

El dirigente, que dijo que la intención es fundar una nueva Conmebol, dejar de lado la corrupción y los malos manejos imperantes, al grado de que en la casa matriz del futbol sudamericano no hay documentos anteriores al 2013 y que la institución tenía inmunidad diplomática.

En términos administrativos, no había instrumentos de fiscalización adecuados, pues no se llevaba una contabilidad estándar o un presupuesto», señaló. «No encontramos balances, no había informes contables, todas las cifras que encontrábamos eran cuestionables o eran incompletas. Era una institución que hasta este año nunca había tenido un presupuesto», expresó.

Domínguez explicó que el objetivo de su administración es generar más valor para el fútbol sudamericano y reinvertir un mayor porcentaje de los recursos en su desarrollo.

«En el pasado, el fin era el dinero y el futbol era el medio. Pero en la nueva Conmebol tenemos claro que nuestro fin como institución es desarrollar el futbol sudamericano, por lo que el dinero es el vehículo para lograrlo, por eso en 2016 reinvertiremos 91 por ciento de los ingresos generados en el deporte», destacó.

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