LA HABANA, CUBA.- La transmisión de madre a hijo del VIH y la sífilis, es ya algo del pasado, por lo menos en Cuba, nación que pasó a ser el primer país que ha eliminado este factor, razón por la cual ha recibido validación de parte de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
La eliminación de la transmisión de un virus es uno de los mayores logros posibles en la salud pública”, dijo Margaret Chan, Directora General de la OMS. “Esta es una victoria importante en nuestra larga lucha contra el VIH y las infecciones de transmisión sexual, y un paso importante hacia una generación libre de sida”, añadió.
“El éxito de Cuba demuestra que el acceso universal y la cobertura universal de salud son factibles y de hecho son la clave del éxito, incluso en contra de desafíos tan complejos como el VIH», afirmó Carissa F. Etienne, Directora de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), Oficina Regional para las Américas de la OMS.
“Esta es una celebración para Cuba y una celebración para los niños y familias de todo el mundo. Esto demuestra que el fin de la epidemia del sida es posible y esperamos que Cuba sea el primero de muchos países que vienen a buscar la validación de que han terminado sus epidemias entre los niños «, manifestó Michel Sidibé, director ejecutivo de ONUSIDA.
De acuerdo con cifras oficiales, anualmente en el mundo, 1.4 millones de mujeres viviendo con VIH quedan embarazadas. Si no se tratan, tienen entre 15 y 45 por ciento de posibilidades de transmitir el virus a sus hijos durante el embarazo, el parto o la lactancia. Sin embargo, ese riesgo se reduce a poco más de 1 por ciento si se suministra antirretrovirales a las madres y los niños en las etapas en las que puede producirse la infección.
Desde 2009, el número de niños que nacen cada año con VIH se ha reducido a casi la mitad, al pasar de 400 mil a 240 mil en 2013. Pero será necesario redoblar los esfuerzos para alcanzar la meta mundial de que hayan menos de 40 mil nuevas infecciones infantiles por año para 2015.
Casi un millón de embarazadas en todo el mundo se infectan con sífilis anualmente. Esto puede resultar en muerte fetal, muerte perinatal o en infecciones neonatales graves. Sin embargo, opciones simples y rentables de detección y tratamiento durante el embarazo, como la penicilina, pueden eliminar la mayoría de estas complicaciones.
La transmisión de madre a hijo de estas enfermedades se considera eliminada cuando las tasas de infección son llevados a niveles tan bajos que dejan de ser consideradas un problema de salud pública. En el caso del VIH, esto se define como menos de 2 de cada 100 bebés nacidos de mujeres con VIH, que es la tasa más baja considerada posible de lograr con los métodos de prevención disponibles en la actualidad. En el caso de la sífilis, la eliminación se define como menos de 1 caso por cada 2 mil nacidos vivos.
jcrh