El restaurante de Messi: milanesa napolitana a caballo | Digitall Post : Digitall Post
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El restaurante de Messi: milanesa napolitana a caballo

El restaurante de Messi: milanesa napolitana a caballo

BUENOS AIRES,- El último emprendimiento de la Pulga a 10 minutos del Camp Nou, El «Bellavista del Jardin del Norte», el restaurante de Lionel Messi recién abierto.  El nuevo proyecto de los Messi -con el hermano del crack azulgrana y los hermanos restauradores Juan Carlos, Borja y Pedro Iglesias, de los más influyentes en la ciudad-, tiene como estandarte el plato preferido de Leo: milanesa napolitana a caballo. Es una de las recomendaciones, aunque la técnica culinaria indica que se trata en realidad de un «solomillo de buey con lacón cocido -fiambre derivado del cerdo- sobre tomate y mozzarella y un huevo de cucú cocido y luego empanado». ¿Cuánto cuesta este plato? 10,50 euros (172 pesos argentinos).

Según el diario catalán Mundo Deportivo, el restaurante tiene muchas reminiscencias de la ciudad natal de Messi, Rosario, uno de los tantos guiños al crack argentino.

El espacio gastronómico, que abre de 9 a 23.30 de martes a domingo, está diseñado como un pueblo imaginario. Se entra por la «florería» y luego se ingresa a un sector en donde se ofrecen desayunos y vermuts. Enfrente hay un quiosco de diarios deportivos del siglo pasado y un metegol.



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Hay mesas de color «verde césped» y asientos a modo de bancos de suplentes de fútbol, además de dos enormes televisores donde se puede ver el deporte rey. La «iglesia», en la que se es posible comer en bancos de misa, está presidida por un bar que tiene una réplica de la campana del Vaticano hecha por el maestro fallero Piñero. En la «plaza del pueblo» se concentran la mayoría de mesas.

También hay peluquería, un enorme jardín y en el piso de arriba surgen cuatro reservados para diez o doce personas que disponen de una gran televisor y la PlayStation 4. Hay además un estacionamiento con capacidad para 30 vehículos. Los detalles en los más de mil metros cuadrados del local están muy cuidados, con ilustraciones en tiza del artista David Buisan, con lamparas en la «plaza del pueblo» que recuerdan los fuegos artificiales, etc.

La carta es un cruce de caminos gastronómico en donde se puede elegir desde un ceviche a unas «bravas». El producto es lo más importante; el chef ejecutivo Rafa Morales dice que es una «renovada cocina tradicional, sin perder la esencia del plato».



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