LOS ÁNGELES, CALIFORNIA,- Lo hemos visto en diversidad de ocasiones en las películas de ciencia ficción: un automóvil que vuela y aunque parezca broma, Google está dispuesto a invertir 100 millones de dólares en dicha operación y el cofundador de la firma, Larry Page está detrás de un par de misteriosas compañías tecnológicas de Silicon Valley dedicadas en alma y cuerpo hacer realidad esta pretensión.
¿Nos adelantamos a la realidad?.
Blooomberg lo ha revelado después de haber accesado al registro de inversores Zee.Aero y en donde figura de manera predominante el empresario multimillonario. Considerar la especie como noticia relevante, tal vez no, Zee.Aero se encuentra a unos pasos de la sede del gigante de internet y de la vinculación entre ambas se rumoreaba por lo menos desde hace 2010.
Lo que sí es nuevo es la precisión de que no es Google, en realidad, sino uno de sus dos fundadores, el que está detrás de Zee.Aero. Siempre según Bloomberg, Page ha inyectado ya US$100 millones en esta startup que está empeñada en crear un avión eléctrico capaz de aterrizar y despegar en vertical, y que cuenta en plantilla con ex ingenieros de la NASA, Boeing e incluso de la aeroespacial Space X.
La otra compañía se llama Kitty Hawk, y se encarga por su parte de desarrollar una especie de dron gigante, de forma alargada y con al menos cuatro hélices para desplazarse. Pese a la revelación, ni Page ni ninguna de las compañías involucradas han querido confirmar estos datos, dando así pábulo a nuevos rumores.
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