ESTADOS UNIDOS.- Este domingo, un hombre atacó el bar gay Pulse, en Orlando, Florida. El sospechoso, Omar Mateen interrumpió de forma brusca una noche de diversión. El incidente, fue llevado a cabo un tirador que juró lealtad al grupo yihadista Estado Islámico (EI) y que provocó 50 muertos, es el peor cometido en territorio estadounidense desde el 11 de septiembre de 2001.

Si bien el territorio de los Estados Unidos, no ha sido escenario de eventos terroristas como los ocurridos en Europa o el resto del mundo, si ha tenido una serie ataques vinculados al extremismo islámico.

– Matanza de San Bernardino –

El 2 de diciembre de 2015, una pareja fuertemente armada abre fuego en ocasión de una cena de Navidad de personal de la salud en San Bernardino, California, asesinando a 14 personas.

Tashfeen Malik, paquistaní de 29 años, y su marido Syed Farook, un estadounidense de 28 años, dotados de fusiles de asalto y de explosivos, fueron luego muertos por la policía.

El EI saluda a los autores de la masacre, a quienes califica como «soldados» de su autoproclamado «califato», sin reivindicar su acción

– Tiroteo en un centro militar –

El 16 de julio de 2015, Mohammad Yussef Abdulazeez, nacido en Kuwait y naturalizado estadounidense, atacó un centro de reclutamiento militar y luego un centro de reservistas de la Armada en Chattanooga, en Tennessee (sur), matando a cinco militares con su fusil de asalto. Fue abatido por la policía.

En diciembre, el Pentágono y el FBI reconocieron que el ataque fue «motivado» por la propaganda de una organización terrorista extranjera, sin mayores precisiones, mientras la familia hizo referencia a los problemas mentales del joven.

El EI llamó a sus seguidores a tomar como blanco a los militares estadounidenses allí donde se encuentren.

– Ataque «inspirado» por el EI en Dallas –

El 3 de mayo de 2015, la policía mató a dos jóvenes armados que habían abierto fuego en la periferia de Dallas, Texas, cerca de un centro en el que tenía lugar un concurso de caricaturas de Mahoma. El diputado holandés Geert Wilders, autor en 2008 de una película que vinculaba el islam al terrorismo, figuraba como invitado.

Según SITE, organización especializada en la vigilancia de los sitios yihadistas, un hombre que reivindicó su pertenencia al EI, afirmó en Twitter que el ataque había sido perpetrado por dos simpatizantes de la organización yihadista.

Fue la primera vez que el grupo reivindicó oficialmente un ataque en un país occidental. El secretario estadounidense de Defensa dijo que el atentado pareció haber sido «inspirado» pero no «conducido» por el EI.

– Maratón de Boston –

El 15 de abril de 2013, dos bombas artesanales accionadas por un par de jóvenes de origen checheno explotaron cerca de la línea de llegada del maratón de Boston (noreste), matando a tres espectadores e hiriendo a otros 264.

Tras cuatro días de caza, Djokhar Tsarnaev fue detenido horas después de la muerte de su hermano a manos de la policía. Fue condenado a muerte en 2015.

– Base de Fort Hood –

El 5 de noviembre de 2009, Nidal Hasan, un estadounidense de origen palestino y que fungía como siquiatra en el ejército, abrió fuego con una pistola automática en la base de Fort Hood, Texas, matando a 13 personas e hiriendo a cerca de 30.

Fue arrestado luego de ser herido por una agente de élite del grupo SWAT tras un fuerte intercambio de disparos.

– El 11 de septiembre –

El 11 de septiembre de 2001, cuatro aviones de línea fueron secuestrados y desviados: dos de ellos fueron estrellados deliberadamente contra las torres gemelas del World Trade Center de Nueva York, otro se estrelló en Pensilvania y el cuarto impactó contra el Pentágono en la periferia de Washington. Reivindicados por Al-Qaeda, estos atentados dejaron unos 3.000 muertos.

jcrh