YAKARTA.- La organización garante de los derechos humanos Human Rights Watch (HRW) denunció hoy la explotación de miles de niños en las plantaciones de tabaco en Indonesia, cuya cosecha es adquirida por tabacaleras locales y extranjeras.
Los menores, algunos de hasta ocho años, están expuestos a la nicotina, manejan químicos tóxicos o usan herramientas peligrosas bajo el intenso calor que azota las plantaciones, documentó HRW en un informe titulado «LlevÓ la cosecha en la sangre: trabajo infantil peligroso en el cultivo de tabaco en Indonesia». El informe está basado en las entrevistas realizadas a 227 personas, entre ellas 132 niños trabajadores del tabaco, de entre 8 y 17 años, en cuatro provincias del país. Muchos niños que trabajan en la cosecha del tabaco dijeron que mezclaron y fumigaron pesticidas y otros químicos. “Argo”, un trabajador de 15 años de Pamekasan, en Java Oriental, dijo que de repente se sintió enfermo cuando aplicaba un pesticida en la granja de su familia. “Una vez vomité. Fue durante la temporada de la siembra y no utilicé máscara y el olor era muy fuerte. Empecé a vomitar”, recordó. Algunos niños también se vieron expuestos a los pesticidas cuando otros trabajadores fumigaron en las plantaciones donde estaban trabajando, o en campos cercanos.
La exposición a los pesticidas ha sido asociada con efectos a largo plazo y crónicos para la salud, tales como problemas respiratorios, cáncer, depresión, déficit neurológico y problemas de salud reproductiva. Indonesia es el quinto mayor productor de tabaco del mundo, con más de 500 mil granjas. La Organización Internacional del Trabajo (OIT) estima que más de 1.5 millones de niños de entre 10 y 17 años trabajan en la agricultura en Indonesia. Human Rights Watch señaló que las empresas tabacaleras indonesias y extranjeras compran el tabaco cultivado en el país, pero ninguna hace lo suficiente para asegurarse de que los niños no desempeñen labores peligrosas en las granjas que están en su cadena de suministro. “Las compañías tabacaleras están ganando dinero a costa de la salud de los niños trabajadores de Indonesia”, dijo Margaret Wurth, investigadora sobre derechos del niño de Human Rights Watch y coautora del informe.
“Las compañías de tabaco no deberían contribuir al uso de trabajo infantil peligroso en sus cadenas de suministro”, añadió. Human Rights Watch recomendó al gobierno de Indonesia lanzar una amplia campaña educativa para promover la concienciación sobre los riesgos para la salud que afrontan los niños que trabajan en la cosecha del tabaco. Bajo las normas de derechos humanos, las tabacaleras tienen la responsabilidad de garantizar que el tabaco que compran no haya sido producido con trabajo infantil peligroso, señaló. “El gobierno debería hacer mucho más para proteger a los niños de los peligros del consumo de tabaco”, afirmó Wurth.
NOTIMEX/JRGA