* «70 ejemplares» fueron rociados con cloro, según señalaron.

Un videomanifiesto, publicado el 25 de septiembre, muestra una inusual campaña contra el ‘manspreading’, hábito masculino de sentarse con las piernas ampliamente separadas, en el Metro.

El audiovisual fue lanzado por la activista Anna Dovgaliuk, de San Petersburgo, Rusia, quien asegura que en su país el problema no se ha tratado públicamente.

La mujer aseguró que el sentarse con las piernas separadas es «una falta de respeto» para las mujeres y los niños, además de que es un vergüenza para la sociedad.

En las imágenes se aprecia a una chica en el Metro de San Petesburgo mientras derrama cloro en la entrepierna de los varones con ayuda de una botella.

Al parecer el criterio de las «piernas abiertas» es meramente de observación y la joven vierte el líquido sin importar que el vagón tenga lugares vacíos.

El ‘manspreading’ es, según el video, una forma de demostrar el machismo. Además, en él se asegura que «70 ejemplares» fueron bañados en cloro y la activista detalla que planea hacer lo mismo en Moscú y Kazán.

Las imágenes, como era de esperarse, causaron gran revuelo en redes sociales. Algunos comentarios de hombres indignados aseguran que el gesto de abrir las piernas es en realidad cuestión fisiológica.

Otros, de plano, amenazan a la chica rusa con tomar acciones legales o hasta con agresiones físicas en caso de que a ellos les toque ser víctimas de su botellita con cloro.

Vale la pena señalar que algunos de los usuarios de Internet observaron el video con ojo crítico y cuestionaron a la activista sobre la veracidad de las imágenes pues los vagones del Metro están casi vacíos. De hecho, muchos aseguraron que es sólo una estrategia de la chica para ganar popularidad en sus redes sociales.

Y por si no era suficiente, otros dejaron claro que les parece absurda la campaña de la joven si ni siquiera es ella misma quien va por ahí en el Metro violentando a los hombres pues, como se ve en sus redes sociales, la mujer rusa no usa el Metro, sino que lleva una vida de lujos.

Incluso uno de los hombres que fueron mojados con aparente cloro escribió en su muro de Facebook que todo era un teatro orquestado por la activista.

«Nos echaron agua encima. Además, el que estaba durmiendo con la capucha también era yo. Claro que es una escena. Esa sensación, cuando llegas a la filmación con dos pantalones extra, y te vas con un salario», escribió.

Ante dicha publicación, y según The Village, la joven que bañó a los hombres con cloro, identificada como María Rein, dijo «no recordar» a todos los que roció, pero que el sujeto en cuestión debe querer «promocionarse» o quizás sólo está «avergonzado».

Imagen: Captura de video

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