* Un hombre fue hallado atorado en un ducto de aire, después de intentar robar un restaurante
* La policía encontró al hombre con su cuerpo cubierto de grasa y sin poder moverse

En California se vivió un caso increíble, pues un hombre fue hallado atorado en un ducto de aire, después de intentar robar un restaurante.

El caso ocurrió así: Un sujeto de 29 años trató de asaltar un restaurante de San Lorenzo en horas de la noche, en ese momento se encontraba cerrado, pero su plan falló y tuvo que huir antes de ser descubierto.

En una táctica ‘extraña’, el tipo se escabulló por un ducto de aire, pero juzgó mal el tamaño, quedó atrapado dentro, «cubierto de grasa y aceite» y sin poder moverse.

Días después un hombre identificado como Igor Campos escuchó los gritos cerca del restaurante.

Horas después la policía de California recibió una llamada de alerta e investigaron el lugar, al llegar encontraron al hombre, con su cuerpo cubierto de grasa y sin poder moverse.

De acuerdo con la página oficial de Facebook de la Oficina del Alguacil del Condado de Alameda, la víctima tenía dos días atascado allí.

Su única compañía era el olor desagradable de la grasa vieja y probablemente una profunda sensación de arrepentimiento.

Los hechos

Según las declaraciones de Campos a medios locales: «Escuché unos lamentos y pensé: ‘¿Quién puede ser?'», dijo.

Una vez que encontró al tipo, llamó rápidamente al 911 y trató de acompañar al hombre aterrado hasta que llegó la policía.

«Le hice preguntas como ‘¿Cuál es tu nombre'», señaló Campos. «Me contestó: ‘Por favor, ayúdame… por favor, no me hagas daño’. Yo le dije: ‘No estoy tratando de lastimarte, estoy tratando de ayudarte'».

Los bomberos tardaron casi una hora en desatornillar la malla metálica del ducto de ventilación y desmontarlo lo suficiente para sacar al tipo.

«El hombre estaba físicamente agotado y sufría deshidratación. Fue trasladado en ambulancia a un hospital local para recibir tratamiento», aclaró la Oficina del Alguacil del Condado de Alameda.

«Es probable que no hubiera sobrevivido otro día dadas las circunstancias».

Según informes, la policía lleva a cabo una investigación de allanamiento y vandalismo para determinar si el tipo intentaba entrar a hurtadillas al restaurante vacío para robar accesorios viejos o cable de cobre.

Sin importar qué le ocurra, tiene suerte de estar vivo: la posibilidad de ir a prisión no puede ser peor que pasar dos días dentro de un oscuro ducto de grasa.

Imagen: Especial

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