* El joven se encontraba de viaje y se le ocurrió facturar la lata como equipaje de bodega
* En la aduana le dijeron que no podía entrar con ningún tipo de líquidos al avión

La cerveza jamás se desperdicia, eso es regla sagrada para cualquier persona catadora del preciado líquido espumoso.

Por ello, un joven australiano llamado Dean, encontró la ingeniosa forma de transportar una lata de cerveza sin ocasionar problemas.

Resulta que se encontraba de viaje, y al pasar por los filtros de seguridad, en la aduana le dijeron que estaba prohibido ingresar con líquidos al avión.

En ese instante, Dean pensó una alternativa para no tirar la bebida y se le ocurrió facturar la lata como equipaje de bodega.

Su objetivo era poder viajar a su destino, desde la ciudad de Melbourne, Australia.

La cerveza es de Emu Export Lager, considerada de las más deliciosas del mundo.

Durante todo el vuelo, Dean creyó que su licor no llegaría, pero tuvo una increíble sorpresa.

Luego del aterrizaje, se dirigió a la cinta de equipaje para reencontrarse con ella.

Finalmente, allí estaba, la pieza llegó a su destino, sin ninguna complicación.

“No estaba seguro si aparecería. Pero sí, allí estaba ella, sola en el carrusel caminando con orgullo. Y ahí estaba yo para recibirla. Fue la perfección”, contó el joven.

La emoción de Dean al ver su cerveza fue inexplicable, después de muchas horas intensas de vuelo, fue increíble poder reunirse con su querido líquido, que degustó sin pensarlo dos veces.