- Un estudio revela que pasar más de 60 horas a la semana sentados aumenta el riesgo de enfermedades cardíacas y envejecimiento prematuro en los jóvenes adultos.
- Aunque muchos cumplen con las recomendaciones mínimas de actividad física, el estudio sugiere que se necesita ejercicio intenso y reducir el tiempo sentado para mitigar los efectos negativos del sedentarismo.
- Los investigadores aconsejan usar escritorios de pie, tomar pausas activas y realizar al menos 30 minutos diarios de ejercicio vigoroso para contrarrestar el sedentarismo y promover la salud a largo plazo.
Un reciente estudio de la Universidad de Colorado Boulder (CU Boulder) y la Universidad de California Riverside alertó sobre los riesgos para la salud de los millennials, quienes actualmente pasan más de 60 horas a la semana sentados debido a su trabajo, desplazamientos y actividades recreativas.
Los investigadores advierten que este estilo de vida sedentario incrementa el riesgo de desarrollar enfermedades cardíacas y acelera el envejecimiento prematuro. La investigación, publicada en la revista *PLOS ONE*, incluyó a más de 1,000 participantes de Colorado, de los cuales 730 eran gemelos, y evaluó el impacto del sedentarismo en indicadores de salud como el índice de masa corporal (IMC) y los niveles de colesterol.
A pesar de que muchos de los participantes cumplían con las recomendaciones mínimas de ejercicio, los resultados mostraron que esto no era suficiente para contrarrestar los efectos negativos de estar sentados durante largas horas», expresó.
«Reducir el tiempo de sedentarismo, realizar ejercicio intenso o una combinación de ambos, podría ser clave para prevenir el envejecimiento prematuro en la adultez temprana», afirmó la profesora Chandra Reynolds, autora principal del estudio.
Lo normal… 30 minutos de ejercicio para combatir enfermedades feas
El estudio reveló que aquellos que realizaban al menos 30 minutos de ejercicio vigoroso al día, como correr o andar en bicicleta, tenían niveles de colesterol y IMC comparables a los de personas significativamente más jóvenes que llevaban un estilo de vida sedentario. Sin embargo, los efectos negativos de estar sentados por muchas horas no se neutralizan completamente, ni siquiera con actividad física intensa.
El análisis, que se centró especialmente en gemelos idénticos para estudiar el impacto del estilo de vida sin la influencia genética, mostró que reducir el tiempo sedentario era más efectivo para mejorar la salud que añadir ejercicio ocasional.
Los investigadores sugieren que, para mitigar los efectos del sedentarismo, se adopten estrategias como el uso de escritorios de pie, realizar pausas activas durante el día y practicar 30 minutos de ejercicio vigoroso de forma regular. «Es el momento ideal para establecer hábitos que protejan la salud a largo plazo», concluyó Reynolds, haciendo un llamado a los jóvenes adultos a tomar medidas preventivas para cuidar su bienestar futuro.