YORK, GRAN BRETAÑA.- De acuerdo a un estudio llevado a cabo por la Universidad de York, en Gran Bretaña, existe una alternativa, natural contra los atracones de comida y el consecuente sobrepeso: la satisfacción del «apetito sexual». Esto, gracias a la producción de oxitocina, la cual es conocida como «la hormona del amor».

Según señalan los expertos, la oxitocina, implicada también en el amor materno, en la lactancia y en el afecto en general, puede reducir el apetito y el deseo de ingerir alimentos. Los expertos analizaron la cantidad de esta hormona en sangre en un vasto abanico de personas de entre 27 y 50 años y luego realizaron un examen de ADN de cada uno para estudiar el tipo de «receptor para la oxitocina (OXTR)» o «el interruptor molecular» que se une a la hormona del amor para ejercer su acción.

Según el tipo de gen presente en el ADN de una persona, la oxitocina puede trabajar de modo más o menos eficiente: aquellas que poseen un gen OXTR más activo, o sea, que responde mejor a la hormona, estás a salvo de los atracones, es decir, que poseen una personalidad menos propensa a este tipo de comportamiento.

En síntesis: la oxitocina puede frenar el atiborramiento de comida y estimular la relajación del organismo, por ejemplo, a través de la actividad sexual.

Lo más relevante de la investigación es que esta hormona puede convertirse en un importante recurso para luchar contra los disturbios alimentarios.

jcrh