Investigadores de la Facultad de Medicina de la Universidad de California en San Diego, Estados Unidos, informan que las mujeres ancianas que permanecen sentadas a lo largo de más de 10 horas al día con baja actividad física poseen células que son biológicamente ocho años mayores en comparación con las mujeres que son menos sedentarias.
El estudio, publicado este miércoles en American Journal of Epidemiology, encontró que las mujeres ancianas con menos de 40 minutos de actividad física moderada a vigorosa al día y que permanecen sedentarias a lo largo de 10 horas diarias tienen telómeros más cortos -pequeñas tapas que se encuentran en los extremos de las cadenas de ADN, como las puntas de plástico de los cordones de los zapatos, protegiendo los cromosomas del deterioro- y se acortan progresivamente con la edad.
A medida que la célula envejece, sus telómeros se acortan naturalmente y se deshilachan, pero los factores de salud y el estilo de vida, como la obesidad y el tabaquismo, pueden acelerar ese proceso. Los telómeros acortados se asocian con enfermedades cardiovasculares, diabetes y cánceres importantes.
aegm.