GUADALAJARA,-  Panee Torres Rebollar especialista en Medicina Familiar, reducir al mínimo el consumo de sal todos los días genera grandes beneficios a la salud como el riesgo de desarrollar hipertensión arterial y por lo tanto accidentes cerebro-vasculares (como los derrames cerebrales) y enfermedades del corazón (como los infartos) hasta en un 60 y 40 por ciento, respectivamente.

“Deberíamos ingerir menos de dos gramos de sal al día, eso quiere decir que prácticamente no hay que añadírsela a los alimentos, porque ya la contienen cuando se preparan”, indicó.

La experta citó el caso de la salsa de tomate o catsup, de uso tan común que no se consideraría nociva, pero cuya composición incluye mucha sal.

No se debe consumir sodio en exceso porque “hay una serie de reacciones químicas que hacen que aumente la presión vascular. Si hay predisposición a la diabetes, la cual de por sí ya causa daño a nivel vascular, añadir sales al organismo puede causar graves problemas de salud”, enfatizó.

En un comunicado, recordó que la sal se añadía hace varias décadas a los alimentos como estrategia de conservación, pero en la actualidad se cuenta con otras técnicas, incluyendo el refrigerado, de manera que ya no es necesario abusar de ella.

A quienes les gusta comer “salado”, les recomendó reducir las cantidades paulatinamente y evitar frituras, papas fritas, embutidos y pastas preparadas, entre otros.

Pidió a la población acudir a realizarse revisiones PrevenIMSS para detectar aumento en la presión arterial y síntomas de problemas asociados al consumo de sal en exceso, como afecciones cardiacas y renales o retención de líquidos.
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