¡Qué semana ¡Qué días! ¡Qué horas y minutos tan álgidos en la relación o choque entre la Administración de Enrique Peña Nieto y el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump.
Cuando se señaló que el ahora canciller Luis Videgaray e Idelfonso Guajardo, secretario de Economía irían a realizar tareas de “alto nivel”, con una contraparte en los Estados Unidos, se entendía que iban a perfeccionar la agenda respecto a la reunión que habría de suceder el próximo martes 31 de enero en Washington entre Peña y Trump; pero los sucesos, tuitts y declaraciones desatados, sepultaron la reunión apresurada y dictada por el mismo Trump.
Mientras Videgaray –de quien ahora se dice fue impuesto por el mismo Trump, así como fue relevado por Obama–, llevaba a Estados Unidos puntos económicos a tratar sobre todo respecto al Tratado de Libre Comercio (TLC); resulta que al incontinente Donald lo que le apuraba era dejarnos en claro a todos los mexicanos que el muro y la política migratoria de deportaciones, era lo toral para su Administración.
Así que en tanto Videgaray no reportaba ningún avance en las negociaciones, Trump nos azotaba con la firma de las llamadas órdenes ejecutivas para erigir el muro a la brevedad posible, en unos meses advertía, a la par que reiteraba que a como diera lugar, México pagará el muro.
La salida de Peña en mensaje nacional para advertir que no pagaremos el muro y señalar que se analizaba arribar o no a Washington el 31 de enero, dieron de nuevo la ventaja a Trump para mostrarnos una vez más la fobia que siente por los mexicanos, adelantándose a Peña para advertir que si México no piensa pagar el muro, la reunión programada no tenía razón de ser.
Sí, la hostilidad se adelantó al desatino de la Administración de Peña Nieto y antes de rechazar formalmente la reunión, Trump lo desinvitó.
Sí, ni duda cabe que el presidente del poderoso coloso al norte de nuestra frontera, equivoca su forma egocéntrica de gobernar su sociedad y las relaciones de la misma, pero Peña Nieto se equivocó también en no cancelar a tiempo, lo que a todas luces, era una trampa más de Trump.
Ya hay quienes atinan a afirmar que estamos en guerra fría con Estados Unidos.
Desde Los Pinos tomaron a juego a Trump en sus inicios como aspirante a la candidatura republicana hacia la Presidencia de Estados Unidos y hoy, nos tiene por lo menos, atemorizados.
Acta Divina… El presidente de los Estados Unidos informa de su propuesta para que México pague el muro, gravando 20% las importaciones de nuestro país.
Para advertir… ¿Quién les fue a enseñar que la declaracionitis no es política ni estrategia?