Cada vez que los presidenciables en México se encuentran en campaña, los mexicanos experimentamos entre unos y otros, una especie de encono que para algunos puede resultar dulce y en otros una experiencia bastante agria.
Son diversos los tópicos que están marcando la ruta al 2018, en los que no pocos de nosotros tenemos puntos de vista que nos llevan más allá de la simple opinión, la charla o hasta la discusión: estamos entrando en el terreno absoluto del negro y el blanco.
Una vez conocidos los resultados electorales del pasado domingo 5 de junio, en donde los priistas perdieron varias plazas que creyeron aseguradas para su partido, ya entre ellos la discordia, los señalamientos y hasta las huidas del barco no son y serán menores. Cada quien busca desde ya, la mejor opción en el poder, incluso fuera del Revolucionario Institucional.
Los panistas, ya no se muestran como un solo partido político y han dejado ver muy temprano a sus electores y seguidores que entre ellos también hay ambiciones personalísimas y de grupúsculos.
Los perredistas ya no saben a qué tirarle, si a las alianzas “del diablo” con panistas y hasta priistas o de plano, ceder ante quienes ya no son más su sangre.
De los otros partidos satélites, ni hablar, porque para ellos lo mismo es el pinto que el colorado y lo único que buscan es continuar adscritos en la nómina electoral, y todo lo que además se derive si hay ganancia en las urnas.
Pero no son los partidos políticos los que más mueven al encono, son los gobernantes que ya instalados en el poder, no lo quieren ceder o aspiran o más.
Ejemplos sobran y puntos de vista igual, pero de que hay manos señaladas que “mecen la cuna” para dividirnos como sociedad, no hay duda.
El caso del control a priori de la contaminación atmosférica en la Ciudad de México y puntos colindantes que tomó en sus manos la Federación sin análisis y conclusiones de la polución y sus causas, que derivaron en entorpecer la vida de los citadinos no sólo quienes nos trasladamos en auto, también de quienes día a día usan el transporte público; así como en direccionar los ataques por la medida del Hoy No Circula reforzado, hacia el jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera, a quien la verdad, sacaron de la jugada.
Qué tal el caso de los secretarios peñistas y la procuradora de la presente Administración, que apuntalando la cerrazón del mismo presidente Enrique Peña Nieto a no discutir nada, mucho menos los impactos de una reforma constitucional, tienen ya a varios puntos del país colapsados por su cerrazón política, mientras miles de maestros de educación básica intentan hacernos entender que con esa nueva ley, los ponen en desventaja laboral.
Peña Nieto y sus huestes, intentaron adherir votos con una política incluyente respecto a las preferencias sexuales y ahora creen que fue determinante en la tunda electoral que recién les propinaron. Siguiendo en la ruta de si no estás conmigo, estás mal, buscarán a jerarcas que advirtieron a sus feligreses no aceptar esta política social en donde todos somos iguales ante la sociedad pero parece que no ante su Dios.
Jaime Rodríguez “El Bronco”, gobernador independiente de Nuevo León se avienta un discurso en donde así como es él, reclama la existencia de “las gordas” como consecuencia de la obesidad y de los embarazados a temprana edad, como si fuera sólo un asunto de género.
Por si alguien no lo había advertido ya estamos en la campaña presidencial y eres blanco o eres negro. Divide y vencerás.
Acta Divina… “Que explique Andrés Manuel López Obrador porqué defiende a maestros ‘delincuentes’.”: Aurelio Nuño Mayer, secretario de Educación.
Para advertir… Mientras nos dividimos, juntos nos hundimos; el dólar ya en 19.25 pesos.