“Cuando un hombre hace algo de lo que se avergüenza, siempre explica que es su deber”: George Bernard Shaw
Actitudes, acciones y decisiones del titular del Ejecutivo federal mexicano siguen siendo incomprensibles algunas, absurdas otras y de pilón las hay sobre ridículos, carentes de toda lógica y encontrando por lo tanto un resultado contrario a lo tal vez esperado. Se sitúa en un primer término la aparición del mexiquense en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, en una sala privada, en una de las destinadas para los viajeros VIP, para la clase alta, para los del poder económico y, ahora se ve, político. Escuchó sin mostrar ninguna irritación la narración de uno de los deportados quejándose de haber sido encadenado de pies y manos, atado a la cintura con cadenas y, reinó el silencio, se dio el saludo y se entregó un paquetito cuyo contenido habla por sí solo de la calidad de las autoridades, sin faltar la promesa de entregarles 25 mil pesos, mil dólares, la cantidad percibida por unas horas de trabajo y ahora ofrecida como garantía de sobrevivencia.
Según un alto ejecutivo del AICM –y como tal se lo dimos a conocer a usted hace algunos días-, no solamente los martes llegan a esa terminal aérea quienes son deportados provenientes de Texas, sino diariamente arriban por lo menos tres aeronaves repletas de connacionales. Las condiciones de su transportación son las mismas, encadenados. Al respecto ni Relaciones Exteriores, ni la Presidencia han emitido reclamo alguno al gobierno de los Estados Unidos por el trato de delincuentes ofrecido a quienes han aportado su fuerza de trabajo en ese territorio. El no contar con los permisos de estancia exigidos por ese país no los hace delincuentes, son transgresores de leyes administrativas y esto está muy alejado del otro concepto. ¿Por qué ese ominoso silencio? ¿Es así como desean les demos los mexicanos apoyo para su negociación con los Estados Unidos? ¿De rodillas todos?
En ese mismo tenor resalta otro hecho: los negocios. En la especie de botiquín de sobrevivencia recibido a su llegada a territorio Azteca, nos platica Claudia Rodríguez les entregan: una botella de agua, un emparedado, una galleta, un gel antibacterial, un paquete conteniendo dos Pinguinos –panques de chocolate de la marca Bimbo-Marinela- y un boleto de autobús para quienes deban viajar al interior a reunirse con su familia, si es que todavía viven en México. Hasta ahora no se sabe si licitaron los boletos de camión o si resultó beneficiado el de siempre, cuántos se adquirieron, cuánto costo, a qué clase pertenecen, etcétera. Justo ahora, cuando la gasolina es carísima y, por lo tanto, el incremento al precio del pasaje foránea va a la alza con el consecuente daño a las empresas camioneras, les lanzan un salvavidas millonario al adquirir por miles el boletaje, mismo del que no están cierto se vaya a utilizar en su totalidad. Menos aún sabemos si corresponde a quienes serán deportados en los próximos meses o de plano ya facturaron y cobraron los de todo el mandato de Donald Trump.
Y lo mismo puede esperarse de las botellas de agua, de la gran cantidad de pastelillos adquiridos, de las cajas de gel. Aunque el negocio más fuerte está en manos de quien prepara los emparedados. Estas facturas habrán de ser millonarias y deben contar con una autorización exprés, con liquidaciones prontas y oportunas, con entrega de comisiones a la paga y un grupito muy, pero muy reducido, de beneficiarios que no son, naturalmente, los deportados. Así pues al silencio, a la aceptación de un mal trato inmerecido a nuestros connacionales, le sigue la realización de otro de los objetivos del gobierno y gabinete actual: acumular dinero, venga de donde venga y con cualquier forma de adquisición, incluyendo las vergonzosas, como la de miles de agendas e impresiones con nombres de empresas a las cuales pueden acudir a buscar empleo.
El resultado negativo no termina. Se hace el llamado a la unidad de los mexicanos ante el momento tan crítico que, dicen, enfrenta el país por la llegada de un nuevo mandatario en los Estados Unidos. Ya de suyo, estas expresiones resultan ilógicas porque nadie nos está declarando la guerra. Una Nación en uso completo de su autonomía y sus formas de gobierno esta dictando las medidas consideradas como necesarias para beneficiar a sus ciudadanos. En México, ¿no deberían estar haciendo lo mismo? Presentarse como una sola voz en respaldo de Enrique Peña Nieto es un hecho imposible y ya debería saberlo quienes así lo pretenden, lo anuncian, lo solicitan.
Un grupo de sesudos asesores está bajo la creencia de ser esa la fórmula para rescatar la imagen presidencial, para recobrar el apoyo y nada más alejado de la realidad. Porque, justamente las acciones emprendidas y anunciadas hacen prever todo lo contrario y la experiencia así lo ha revelado. Empecemos por los antecedentes: a raíz del terremoto de 1985, cuando miles de citadinos perdieron sus hogares, a sus familiares, cuando todo se veía caótico y sin ningún control gubernamental –la organización de ciudadanos evitó daños mucho mayores-, mandatarios estatales se dieron a la tarea de ofrecer casa, escuela, trabajo a quienes desearan abandonar la capital de la República e iniciar de nuevo el camino con una base importante para su reconstrucción personal, patrimonial y familiar.
La solidaridad duró muy poco tiempo y los habitantes de las entidades se rebelaron contra las decisiones de sus gobernadores. Lo ofertado eran unidades, fraccionamientos con respaldo oficial en su construcción y otorgamiento de crédito, por lo tanto, los habitantes ya tenían tiempo, años, esperando su vivienda y para ello les habían, incluso, hecho descuentos permanentes. Por lo tanto, ver alejarse ese bien de manera inmediata provocó mucho rechazo. Igual sucedió con quienes vieron ofrecer empleo y ayuda económica a los de fuera sin haber hecho absolutamente nada por los coterráneos. Y lo mismo sucedió en cuanto a las inscripciones en las escuelas y las atenciones médicas. No hubo ya unidad en torno a quienes habían sufrido pérdidas porque en general, el panorama no era para convertirse en “candil de la calle y oscuridad en la casa”.
Se presentó una de las más infames campañas: “haz patria y mata a un chilango”. Y tal frase la llevaban a bordo de camiones, autobuses, pegada a las ventanas de las casas, en las puertas, inclusive se vendieron placas para colgarse en los mostradores de las tiendas. En el presente las declaraciones van en un sentido muy similar. En el aeropuerto, Peña Nieto ofrece 25 mil pesos a los deportados para iniciar su estancia. ¿Por qué no se ha creado un seguro de desempleo en el cual y durante seis meses se entreguen poco más 4 mil pesos como ayuda? Se les entregan boletos de autobús y no son capaces de conseguir tarifas de descuento o de otorgar subsidios para quienes tienen que trasladarse de una entidad a otra y son estudiantes o desempleados.
La UNAM aparece dispuesta a recibir a los estudiantes llegados de los EU, ya sea para seguir en esas instalaciones sus estudios o para encontrarles espacios en otras instituciones incorporadas del país. ¿Y los que no lograron matricularse, se presentaron a los exámenes, hicieron fila desde las madrugadas? Para ellos no solamente no hubo cupo sino no se presentó la menor intención de encontrarles otro centro educativo, de darles alguna alternativa. Simplemente la puerta se cerró.
Dados los antecedentes se pueden esperar muchas reacciones de los mexicanos, sobre todo pueden salir expresiones no dichas con anterioridad, guardadas pero existentes: “se fueron y nos quedamos quienes queremos al país, los que no nos rajamos, los que hemos aguantado todo pero amamos la tierra”. Y entonces llegará la desunión, la división de los ciudadanos de la manera más cruel porque está basada en un rencor provocado por quienes hoy pretenden hacer llamados a la unidad. Peña Nieto dijo sin mostrar ningún rubor: “México sigue creciendo -¿???¿???, ¿ya vio los cada vez menores porcentajes revelados por especialistas?-, es un país que está generando oportunidades para sus connacionales –pero no para quienes aquí habitan- y yo espero que eso les permita encontrar un espacio aquí de desarrollo personal” . Solo faltó publicitar tenían a la mano una guía para conseguir alguna chamba.
Finalmente, se supo que solamente cinco de los repatriados fueron receptores de los 25 mil pesotes, cantidad que fue capaz de arrancar una incomprensible declaración: “yo dejé una familia allá que tal vez ya perdí por ahorita, pero cómo está la situación, no quiero regresar allá”. Dice el viejo refrán: “ladrón que roba a ladrón, tiene 100 años de perdón”, Así que “para los toros de Jaral, los caballos de allá mismo”, traducido a estos hechos, para un mentiroso, un mitómano bilingüe.
NUÑO ES UN COPIÓN
Uno de los renglones más discutidos y rechazados dentro de la Reforma Educativa es la pretensión de privatizar las escuelas. El plan a seguir muestra un financiamiento otorgado por una institución crediticia a esas agrupaciones de padres de familia oficializadas ante la SEP, para llevar a cabo todas las adecuaciones, reconstrucciones, habilitación de los planteles escolares, incluido en esto el mobiliario. La garantía de que la sociedad de padres liquidará el préstamo con un módico interés anual, se centra en el predio en el cual están ubicadas las aulas. En el Distrito Federal los terrenos de estos inmuebles son valiosísimos, más aún aquellos ubicados en las colonias como Lomas de Chapultepec, Polanco, Santa Fe, entre muchas otras ubicadas en las zonas de mayor plusvalía.
Esta idea que marca el arranque de la privatización surge de las llamadas escuelas “chárter”, consideradas como una opción de rápido crecimiento en materia de elección y responsabilidad en la educación pública. Y surge justo cuando deciden dejar fuera de toda operación a la dependencia encargada de construir aulas en todo el país. Su financiamiento puede ser también público y a cambio de verse manejadas con autonomía, hacen a profesores, padres y miembros de la comunidad responsables del desempeño académico y financiero. Según la información recabada, es un modelo típico del capitalismo, conduciendo sin lugar a dudas a la privatización del sistema educativo y es un claro ejemplo de un modelo descentralizado. En este modelo el papel del Estado es minoritario.
Aurelio Nuño simplemente copió un esquema ya puesto en práctica en Estados Unidos y el cual pretendía difundir o mejor dicho imponer la nueva titular de ese sector Betsy Devos, quien llevara al Senado norteamericano a, por primera vez en su historia, obtener un desempate con el voto del vicepresidente para oficializar su nombramiento.
Ya con estos ejemplos podemos explicarnos porqué los miembros del gabinete de Peña Nieto están tan empeñados en parecerse a los integrantes del gobierno del vecino del Norte y también el hecho de permanecer en franca y abierta obediencia a sus dictados. Finalmente, éstos provienen de la admiración sentida hacia quienes carecen, en principio, de los niveles culturales que, seguramente, no aparecen en los genes del grupo Atracomucho. Es también lo que da sentido a la forma de dirigirse hacia los mexicanos, lejos de saberse receptores de salarios producto de nuestros impuestos, emergen con autoritarismo, irrespetuosos.
LA FREGONERÍA ANDANDO
Se supo, desde su instalación, el famoso Plan Mérida no era otro que el mismo aplicado en Colombia. Aunque habrá de reconocerse cierta lógica en Calderón al no aceptar una imposición completa. Pero ahora, ante la debilidad mostrada por Peña Nieto, para los integrantes del gobierno de EU, entre ellos John Kelly, no resulta nada insultante señalar que el combate contra los estupefacientes que consumen sus adictos, debe combatirse en nuestro territorio, antes de llegar a la frontera, a su frontera, a la que permite el paso de todas las drogas con impunidad total y corrupción galopante.
Dijo Kelly sobre las incursiones de EU en Colombia: fueron erradicadas millones de plantas de cocaína, incautaron toneladas de cocaína y se destruyeron centenares de laboratorios. No habló de los miles de muertos colombianos, menos aún de los contabilizados en México producto de un mercado de alto consumo llevado a cabo en su país, en donde se lavan por miles y miles los millones de dólares producto de la venta del narcomenudeo y hasta ahora no han revelado el o los nombres de los capos operando en sus fronteras, administrando las dosis suministradas en las calles. Los malos, están en otro lado y son quienes envenenan, dicen, a los norteamericanos.
Si además de poner a los muertos, la mala fama, se permite la incursión de tropas en, por ejemplo, Guerrero, en donde están detectados los plantíos de amapola más abundantes de América, ya podemos ver con mayor claridad el futuro que nos espera. Eso sin contar con las grandes fortunas de las cuales se apoderan cuando los capos extraditados sin tener siquiera sentencia en México, confiesan poseer y entregan legalmente. O sea, los de Peña Nieto siguen jugando a perder-perder.
Y aún falta por saber cómo va a quedar el envío de las remesas. En este renglón lo fuerte no está precisamente en el envío de los connacionales sino en muchos otros renglones y, si lo captado por las familias de quienes trabajan en EU representa un envío superior a los 73 millones de dólares diarios, lo cual al año es casi cinco veces superior al presupuesto autorizado para el sector salud, también está por verse esa fortaleza que no requiere de los gritos sino del trato amable, cordial, del tono bajo para negociar… según el vocero presidencial.
DE LOS PASILLOS
El Congreso de Estados Unidos registra puntualmente el avance de Andrés Manuel López Obrador rumbo a la elección presidencial del 2018. Apunta: si el presidente Enrique Peña Nieto no logra resultados positivos en relación con su homólogo estadounidense, la posición del principal líder opositor del país se fortalece. “El público mexicano parece estar apoyando al presidente Peña Nieto en su posición frente al presidente Trump, pero la opinión pública puede voltearse contra él si fracasa en trabajar de forma productiva con la administración Trump”, señala un reporte del Servicio de Investigación Congresional (CRS, por sus siglas en inglés) que ayuda a los legisladores estadounidenses en sus tareas. “El descontento con Peña puede incrementar el apoyo de los votantes por Andrés Manuel López Obrador, un populista de izquierda que no tiene miedo de enemistarse con Estados Unidos, en las elecciones de 2018 en México”, concluye el análisis…
Los días 26 y 27 de mayo concentrarán la atención de los ciudadanos de todo el mundo. La reunión entre el Papa Francisco y DT, contemplada como parte de las reuniones del G7, cuenta con todas las posibilidades para llevarse a efecto. Por ahora, algunos prolongados silencios en el Vaticano hacen crecer las expectativas del encuentro. El renglón migratorio será relevante si llegan a verse cara a cara… Seguramente Saramago, de seguir con vida, hubiese hecho un texto magistral sobre esta experiencia. En su tomo El Evangelio Según Jesucristo –cuya edición prohibió durante casi una década la Iglesia Católica y sólo fue posible su impresión al anunciarse sería receptor del Premio Nobel- recreó una conversación entre el Todopoderoso y Satán. Por lo tanto…
La administración de los recursos de la nación por parte de la gestión de Enrique Peña Nieto se caracterizan por al abuso y el despilfarro, de acuerdo a la Auditoría Superior de la Federación y organismos internacionales como la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal). México es el país de América Latina con el mayor crecimiento de la deuda de su sector publico respecto del tamaño de la economía. La dinámica de los pasivos a cargo del Estado ha puesto bajo la lupa de las agencias calificadoras la solvencia fiscal del gobierno. Lo peor es que los recursos tributarios se destinan en mayor medida al pago de elevados salarios, bonos, prebendas y privilegios, así como fiestas y regalos para tener contenta a la clase política en su conjunto y no a cubrir las necesidades de la población.
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