Por primera vez en París, el Palacio de Tokio, organizó una visita exclusiva para visitantes nudistas en un museo de arte moderno y contemporáneo para que todo tipo de personas tengan alcance al arte y la cultura.
La exposición visitada fue «Discordia, hija de la noche» y los 160 participantes realizaron todo el recorrido desnudos en su totalidad. Al terminar, les ofrecieron un brindis en la terraza del museo a todos los participantes nudistas, la vista iba directo a la Torre Eiffel.
Con este evento, a la Asociación de Nudistas de París le quedó clarísimo que los tabúes por parte de la gente hacia el cuerpo pueden disminuir y que, eventualmente, la sociedad podrá estar abierta a otros estilos y filosofías de vida. Fue tan exitosa la propuesta que en 48 horas las entradas ya se habían agotado.