En 1969, para conmemorar el 150 aniversario de la primera publicación de Alicia en el País de las Maravillas, Mark Burstein, quien entonces dirigía la Lewis Carroll Society of North America, invitó al famoso pintor Salvador Dalí para ilustrar una edición conmemorativa del libro.
Marcel Duchamp profetizaría que los artistas emergentes después del Dada “como Alicia en el País de las Maravillas (…) tendrían que pasar a través del espejo de la retina para encontrar una expresión más profunda.”, y el vínculo entre el famosísimo libro de Lewis Carroll y el trabajo de los surrealistas era uno sencillo de encontrar.
El surrealismo comenzó como un movimiento literario, y encontró en figuras como Salvador Dalí su representación plástica. Es por ello que la colaboración es notable, además de que el pintor español también tomaría la figura de Alicia –a quien representaba en su carácter lúdico como una niña que salta la cuerda al tiempo que se transforma en figuras botánicas– para realizar esculturas.
con información de Farenheith
jcrh