René François Ghislain Magritte (21 de noviembre de 1898, en Lessines, Bélgica – 15 de agosto de 1967, en Bruselas, Bélgica), puede ser considerado como un personaje clave en la historia del arte contemporáneo. Tras realizar sucesivas búsquedas abstractas, futuristas y cubistas se orientó hacia el surrealismo, bajo la influencia de Chirico, a cuyo movimiento se unió en París desde 1927 hasta 1931.
En sus cuadros reprodujo objetos y personas convencionales (con una técnica que los hace parecer absolutamente real) y los agrupa de manera paradójica, también usa la asociación libre e inesperada de elementos sin relación alguna, con los que produce una sensación extraña y misteriosa.
Esta implementación de imágenes cotidianas con objetos corrientes (realizados con una pintura simple, de fondos planos y colores claros) tiene influencia de la pintura de Max Ernst. Magritte busca cambiar la relación entre los elementos de sus representaciones, por este motivo cambia sus tamaños, sus perspectivas y realiza combinaciones complejas en relación a la naturaleza de los objetos. Este nuevo esquema, determinar las bases para el desarrollo del pop art o el arte conceptual.
Con posterioridad pasó por un período neoimpresionista y por experiencias futuristas y abstractas, pero pronto volvió a su arte, donde provocaba inquietud o sorpresa. Para sus obras se inspiró en lo absurdo, como en el movimiento perpetuo, en la parodia en Esto no es una pipa o en lo insólito como en Filosofía en el gabinete, su pintura reflexionó sobre temas metafísicos.
Mediante sus enigmas visuales, Magritte logró crear una obra de una gran originalidad, con imágenes sencillas, y en sí mismas comprensibles, conseguía transmitir significados. Su obra es mas conceptual que la de sus contemporáneos. Mientras que Dalí invocaba al sub-consciente emocional, Magritte apeló a la inteligencia del espectador, buscando siempre la contradicción intelectual o verbal (por ejemplo, el título de sus obras también era surrealista).
con información de agencias e internet