MÉXICO.- La historia de Els Joglars es la historia de la búsqueda y la construcción de un lenguaje teatral partiendo de la escuela de mimo clásico. Sus primeras obras pertenecen a este esquema, pero al cabo de unos años, junto al aprendizaje consciente y exigente de las técnicas de expresión del cuerpo, ve también la necesidad de abrir nuevos caminos al mimo.
Será en el Festival de Zurich de 1967, en el que actúan con los mejores nombres del mimo internacional, cuando Els Joglars son conscientes de veras del cambio que habían iniciado en un arte que se hallaba desde hacía tiempo en saco roto.
Y es así cuando, de una forma seria, se decide la profesionalización de la compañía con una fórmula cooperativizada que será un claro sinónimo de sacrificio y austeridad, dedicación exclusiva y muchas horas de trabajo.
La compañía barcelonesa Els Joglars prepara para la edición 44 del Festival Internacional Cervantino (FIC) la puesta escénica V.I.P. (Very Important People), en la que se cuestiona la crianza que llevan a cabo los padres actuales que, contrariamente a lo que fue su niñez, dan a sus hijos libertades, privilegios exagerados y tratan de cumplir todos sus caprichos.
El director del montaje, Ramón Fontseré, expresó que esta obra no pretende ser didáctica, sino hacer una crítica a la educación de los niños, quienes en vez de ser educados y amables se convierten en tiranos.
V.I.P., que es un espectáculo descrito como visual y directo, se presentará los días 7 y 8 de agosto en el Teatro Principal de Guanajuato; cuenta con una escenografía minimalista y un vestuario especial.
Los cinco actores de la compañía, Ramón Fontseré, Pilar Sáenz, Xavi Sais, Dolors Tuneu y Xevi Vilá, representan en V.I.P. a más de una veintena de personajes y cuentan la vida de Lucas, el niño protagonista. La historia inicia a partir de la concepción y se desarrolla hasta llegar a los ocho o nueve años del infante, cuando es coronado rey de la casa y para esa edad ya tiene desarrollada su estrategia de manipulación.
Somos una compañía que nos gusta jugar y por tanto lo llevamos al máximo, por ello hacemos el milagro de multiplicarnos. Es una cosa muy habituada que un actor haga dos, tres, cuatro personajes, que cambie el cuerpo, la peluca, la voz; es algo que nos gusta hacer. El teatro lo entendemos como juego y qué mejor para un actor que interpretar a un niño”, puntualizó Ramón Fontseré.
Reiteramos, Els Joglars fue fundada en 1961 con un propósito dual: hacer teatro de vanguardia y popular. A lo largo de más de 50 años han hecho propuestas escénicas fundadas en un largo proceso de investigación, al buscar rupturas tanto en los contenidos como en el monta.
con información de la Secretaría de Cultura y la compañía Els Joglars
jcrh