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- LaLiga española tiene un problema que no es Vinicius. Vinicius es la víctima. Hay un problema muy grave», afirmó el domingo su técnico, Carlo Ancelotti.
- El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, también mostró su solidaridad con Vinicius «no hay lugar para el racismo en el futbol ni en la sociedad».
- El campeonato español había emitido un comunicado tras el encuentro condenando lo ocurrido y afirmando que investigaría los sucesos y «en caso de detectar algún delito de odio.
Los insultos que sufrió el delantero brasileño Vinicius el domingo en el campo del Valencia levantó una nueva ola de indignación; esto hizo repensar en el espectro del racismo en el futbol español.
«Lo primero es reconocer que tenemos un problema de comportamiento, de educación, de racismo», afirmó este lunes el presidente de la Federación Española (RFEF), Luis Rubiales. Él piensa que «mientras haya un solo aficionado, un solo indeseable o grupo de indeseables, que insulte por condición sexual, por color de piel o credo, tenemos un grave problema».
Antes, en un comunicado, la RFEF animó a la Comisión Antiviolencia y al Comité de Competición a «tomar cartas en el asunto incluso con cierres de gradas cada vez que esto suceda y de estadios cuando sea por reincidencia».
Rubiales también pidió a los clubes que «si hay sanción, que el propio club tiene que asumir; que no lo dilate con procedimientos demorados en el tiempo» para ayudar a combatir el problema.
El domingo, Vinicius, a quien critican por encararse con aficionados y jugadores rivales, se quejó de haber sido llamado «mono» en la derrota 1-0 contra el Valencia.
Gritos de «mono»
El acta del encuentro reflejó que «un espectador» se dirigió a Vinicius «gritándole mono, mono», como muestran las imágenes de televisión.
«No era la primera vez, ni la segunda, ni la tercera. El racismo es normal en LaLiga. La competición piensa que es normal, lo mismo la Federación y los rivales lo alientan», afirmó el jugador brasileño en sus redes sociales.
Expulsado tras un altercado con un rival, que no vio la roja, Vinicius añadió que «el premio que ganan los racistas es mi expulsión».
Vinicius, que en enero tuvo que ver como unos aficionados del Atlético de Madrid colgaban una efigie suya de un puente, pidió «acción y castigo».
Sus palabras provocaron la reacción del presidente de LaLiga, Javier Tebas, criticando el ataque del jugador al campeonato español.
«Antes de insultar e injuriar a LaLiga, es necesario que te informes adecuadamente», escribió Tebas en sus redes sociales, aludiendo al reparto de competencias a la hora de poder sancionar.
El domingo, el campeonato español había emitido un comunicado tras el encuentro condenando lo ocurrido y afirmando que investigaría los sucesos y «en caso de detectar algún delito de odio, LaLiga procedería a tomar las acciones legales oportunas».
Denuncias
En el mismo comunicado, LaLiga recordaba haber presentado nueve denuncias por insultos al jugador en las dos últimas temporadas ante el «Comité de Competición de la RFEF, Comisión Estatal contra la Violencia, el Racismo, la Xenofobia y la Intolerancia en el Deporte, la Fiscalía de Odio y los Juzgados» ordinarios.
La Comisión Antiviolencia señaló este lunes que ya está «llevando a cabo las tareas de análisis de las imágenes disponibles para lograr la identificación de los autores» de los insultos y «proponer las correspondientes sanciones».
El 28 de febrero, esta Comisión multó con 4,256 dólares y prohibición de entrada a estadios durante un año a un aficionado del Mallorca que había insultado al brasileño.
También el Valladolid suspendió a una decena de sus abonados por los insultos a Vinicius en el partido del 30 de diciembre pasado contra el Real Madrid.
El presidente del club vallisoletano, la leyenda brasileña Ronaldo Nazario, escribió «Vini, cuenta conmigo en tu lucha. En nuestra lucha», tras lo ocurrido en Valencia.
El equipo valencianista afirmó este lunes que «expulsará del estadio de por vida a los aficionados que profirieron gestos racistas» contra Vinicius.
Además, la Fiscalía de Valencia abrió este lunes una investigación por un presunto delito de odio por lo ocurrido, después de que el Real Madrid, junto con el sindicato de futbolistas, presentaran una denuncia ante la Fiscalía General del Estado.
El equipo merengue se personará como acusación particular, si las investigaciones del ministerio público acaban ante un juez.
Mensajes de apoyo
«Lo que ha pasado hoy ha pasado otras veces, pero así no. Es inaceptable. LaLiga española tiene un problema que no es Vinicius. Vinicius es la víctima. Hay un problema muy grave», afirmó el domingo su técnico, Carlo Ancelotti.
También sus compañeros del Real Madrid emitieron palabras de ánimo al brasileño, que recibió mensajes de apoyo de todos los ámbitos de la sociedad.
La vicepresidenta segunda del gobierno español, Yolanda Díaz, afirmó que «los cánticos racistas en los estadios de futbol no representan a nuestro país, ni a ninguna hinchada de futbol. Seguiremos trabajando para acabar con el racismo».
El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula Da Silva, afirmó desde Japón que «no es posible, en pleno siglo 21, tener un prejuicio racial tan fuerte en tantos estadios de futbol» considerando «injusto» que Vinicius «sea insultado en cada estadio en el que juega».
El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, también mostró su solidaridad con Vinicius «no hay lugar para el racismo en el futbol ni en la sociedad».