El grito al final de partido que el delantero francés André-Pierre Gignac le dedicó a Jesús «Chuy» Corona terminó por acaparar las redes sociales.

Tigres recibió al Cruz Azul en lo que fue un partido sin mucho chiste.

Al 19, con gol de Jonathan Rodríguez, la Máquina se fue al frente.

Mientras tanto, Tigres pareció tomar las cosas con calma.

Javier Aquino puso un tiro al travesaño que puso a la grada regia de pie.

Sin embargo, el que tenía más oportunidades de finiquitar las cosas era Cruz Azul.

Poco a poco las oportunidades se fueron y al 91, en un saque de banda, surgió la magia del francés.

Luego de techar a un defensa azul, el delantero no dejó caer el balón al césped y la tomó de aire para hacer el empate, en una clásica «cruzazuleada».

Se patentó una vez más que lo de la Máquina no es aguantar la ventaja en el marcador…

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Así terminó el partido, en el que el portero y el delantero se mantuvieron en ciertos conatos de bronca.

Finalmente, cuando el arbitro del juego marcó el final, ambos futbolistas se buscaron y encontraron al centro del campo.

Sin embargo, un grito de Gignac retumbó en la cancha…

«¡Eres mi hijo!», remarcó el francés tres veces al arquero mexicano que, dicho sea de paso, tiene varios casos violentos en su historial.

Pero esta vez, con el empate de último minuto, parece que no le quedó más que soportar la burla…

Aquí te dejamos el resumen del duelo: