FRANCIA.- Portugal llegó a la Europa 2016, con serias aspiraciones de éxito, debido a una cosa: en sus filas milita Cristiano Ronaldo, uno de los dos mejores futbolistas del planeta. Sin embargo, ante la debutante (y aparentemente víctima) Islandia, el lusitano poco y nada pudo hacer.

El juego terminó empatado a un gol. Y lo más apremiante, es que quedó demostrado que el accionar de Portugal, depende mucho de que tan inspirado se encuentre Cristiano Ronaldo.

Cristiano Ronaldo fue la imagen de la impotencia de Portugal para superar el muro islandés el martes en el empate 1-1 del debut en la Eurocopa: ocasiones falladas, gestos de rabia y demasiados nervios ante el paso de los minutos, demostrando que su Selecçao depende mucho de su inspiración.

Marcado muy de cerca por los contundentes defensores islandeses, se enfadaba airadamente en cada falta que recibía. Hasta se negaba a dar lo mano a los jugadores rivales cuando se la ofrecían para ponerse de pie, lo que entre los periodistas generó un cierto malestar al percibir falta de deportividad.

Cristiano estuvo muy activo en ataque y tuvo varias ocasiones importantes. Pero lo cierto, es que Portugal no es el Real Madrid, y el famoso delantero no está arropado de la misma forma que le ocurre con los merengues, donde comparte créditos con Gareth Bale y Karim Benzema.

Recordemos que previo a la Eurocopa, Portugal perdió un partido, ante Inglaterra (1-0) en Wembley, pero Cristiano no estaba.

Acababa de ganar la Liga de Campeones con el Real Madrid y Portugal le dio unos días de vacaciones antes de incorporarse a la concentración. Él aprovechó para ir a relajarse al mar, a la isla de Ibiza.

Su primer partido después de la final de la Champions fue el «ensayo general» del equipo antes de viajar a Francia, un amistoso ante Estonia que Portugal ganó 7-0, con un doblete de CR7, más 7 que nunca. En consecuencia, se esperaba que el lusitano se hartara de anotarle a Islandia, cosa que no pasó.

En la pasada Eurocopa, en 2012, a Cristiano le costó encontrar la inspiración, quedándose sin marcar en los dos primeros partidos, lo que disparó las alarmas.

Pero entonces apareció en el tercer partido de su grupo para lograr dos tantos con los que ganar 2-1 a Holanda y clasificar a los lusos para los cuartos de final. Allí consiguió el gol que sirvió para derrotar a la República Checa en cuartos (1-0) y llegar a semifinales, donde España les cortó el paso en la tanda de penalties.

Cristiano, autor de 58 goles con su selección, puede al menos consolarse con haber igualado el récord de Luis Figo de más partidos internacionales con Portugal, con 127.

jcrh