PARÍS, FRANCIA.- Ya lo había dicho y predicho Conchita Martínez, que Garbiñe Muguruza tenía el potencial para hacerse de la victoria en Roland Garros. A sus 22 años, dio cuenta de la número uno del Mundo, Serena Williams y ahora, todos se preguntan hasta dónde podrá llegar.

Muguruza, 12 años más joven que Serena Williams, hace tiempo que figura en todas las previsiones sobre la jugadora que podía suceder a la estadounidense como reina del circuito. Tras su exhibición de poderío del sábado ahora es la principal candidata. Serena ha ofrecido señales de cansancio en los tres últimos grandes, perdiendo en semifinales del US Open ante la italiana Roberta Vinci y en la final de Australia, frente a la alemana Angelique Kerber.

En el primero de estos partidos Serena fue la que cedió a la ansiedad, cuando tenía la oportunidad de igualar el récord de 22 victorias en Grand Slam de la alemana Steffi Graf. En el segundo, Kerber, de 28 años, completó el partido de su vida, una actuación extraordinaria, con 16 errores en tres sets.

El caso de Muguruza es diferente. Es capaz de jugar de tú a tú a la reina del circuito y derrotarla. Ella es consciente.

Tiene un futuro reluciente, sin duda. Ya juega en los grandes escenarios y sabe cómo ganar un Grand Slam», reconoció Serena Williams.

Sam Sumyk, el francés que dirige la carrera de Muguruza desde septiembre, prefiere mantener los pies sobre la tierra. Tampoco comparte que sea el final de la era de Serena Williams, que ganó el primero de sus 21 grandes hace 17 años.

«Ustedes van muy rápido, ella seguirá mucho tiempo, nosotros necesitamos a Serena, es una jugadora fantástica», dijo el bretón a los periodistas.

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