
ESTADOS UNIDOS.- Dallas vs Pittsburgh, una de las grandes rivalidades de la NFL, especialmente durante la década de los 70, vivirá este domingo un nuevo capítulo.
Ahora no se trata de Troy Aikman o Tony Romo…. y tampoco se trata de la «Cortina de Acero». Este domingo, todo se puede resumir a lo que hagan Ben Roethlisberger y en especial, el mariscal novato de los Vaqueros, Dak Prescott.
Curiosamente, ambos jugadores han vivido situaciones similares…
En el 2004 era Roethlisberger el novato de moda, haciendo equipo con Jerome Bettis y la defensiva mejor clasificada de la NFL logrando 13 victorias al hilo después de sustituir al lesionado Tommy Maddox al conducir a los Acereros al partido por el título de la AFC.
Ahora se trata de Dak Prescott, el mariscal de 23 años con calma extraordinaria que rápidamente ha pasado de arriesgada selección de cuarta ronda a una parte quizá indispensable del equipo que llegó a media temporada en la primera posición de la NFC.
Existe una gran diferencia. Mientras que a Roethlisberger básicamente le pidieron fungir como administrador del juego y dejar a la defensiva hacer el trabajo —en su primera temporada sólo tres veces envió pases para más de 200 yardas— a Prescott se le ha solicitado hacer más. En ciertos sentidos, mucho más.
Prescott va camino a rebasar las 4 mil yardas aéreas y ha convertido a Tony Romo, quien resulta ser el líder de pases de todos los tiempos de la franquicia, en un reservista de 20 millones de dólares.
Bajo la guía de Prescott, los Vaqueros marchan con foja de 7-1, todos sus triunfos han sido al hilo, lo que marca la tercera racha más prolongada de algún mariscal novato en la historia de la liga
Claro, mucho del éxito de Dak, se debe a la combinación que ha tenido con el corredor novato Ezekiel Elliott y el receptor abierto Dez Bryant, la cual se ha vuelto tan dinámica como el trío de Roethlisberger, Le’Veon Bell y Antonio Brown en Pittsburgh.
No es un secreto que los Acereros (4-4) se encuentran en un bache. En su racha de tres derrotas consecutivas el fin de semana pasado tuvieron una deslucida actuación en Baltimore que los desbancó del primer lugar en la AFC Norte. Hay tiempo para retomar el rumbo. El año pasado lo hicieron, teniendo marca de 6-2 en el transcurso de la segunda mitad hasta conseguir boleto para playoffs. Esta vez el primer paso será más difícil.