KONYA,TURQUÍA,- Fueron 90 minutos bastante entretenidos con un buen fútbol ofensivo. El partido se caracterizó por el dominio local. El equipo local trató de tener la pelota y no dejar jugar al rival. Los visitantes se centraron en la defensa y en sorprender a la contra.
Andriy Yarmolenko de penalti y Artem Kravets dieron una ventaja de dos goles a los ucranianos en Konya, pero Hakan Çalhanoğlu dio vida a Turquía. Su saque de esquina fue rematado a gol de cabeza por Ozan Tufan antes del descanso, mientras que en el minuto 81 de penalti empató el encuentro.
r3