PARÍS, FRANCIA.- Como resultado de los bochornosos incidentes de violencia que protagonizaron sus aficionados este sábado, las autoridades de la UEFA han determinado que si vuelven a generar brotes de violencia, las selecciones de Inglaterra y Rusia podrían ser descalificadas de la Eurocopa 2016.

La UEFA abrió un expediente, pidió a ambas Federaciones que insistan ante sus fanáticos y calificó de «inaceptables» los incidentes, que dejaron a un aficionado inglés al borde de la muerte, además de 35 heridos y decenas de detenidos.

El ministro de Interior de Francia, Bernard Cazeneuve, anunció prohibición de alcohol en «zonas de riesgo», es decir, en los alrededores de los estadios, en tanto la Policía de Marsella informó que casi todos los heridos se recuperan.

La UEFA acusó de comportamiento racista a los aficionados rusos, que también atacaron a los ingleses en pleno partido, detrás del arco que defendía Joe Hart, al punto que algunos hinchas tuvieron que saltar al campo del Velodrome.

Viajeslav Koloskov, funcionario de la Federación Rusa, dijo que no espera una deducción de puntos para Rusia, pero sí «una fuerte multa», mientras que también expresó que las medidas de seguridad en Marsella fueron insuficientes.

El encuentro estaba catalogado de máximo riesgo y unos 1.200 efectivos fueron movilizados en la ciudad.

El fanatismo «ultra» en el fútbol ruso comenzó tras la caída del comunismo, con bandas organizadas como los Gladiadores del Spartak Moscú o los del CSKA y Zenit de San Petersburgo, que en 2007 acuchillaron a un jugador africano de su equipo, exigieron que no hubiese jugadores negros y en 2009 pidieron al club que no dejara ingresar mujeres al estadio.

jcrh