CHIHUAHUA,-  Con el objeto de cuidar su nutrición y bienestar la delegación del IMSS ha resaltado la importancia de administrar una alimentación balanceada al adulto mayor. Ismael Rodríguez Chávez coordinador auxiliar de Salud Pública del IMSS, además de personalizar la dieta, al tomar en consideración el estado general de salud.

Por cuestiones de edad, señaló, en casi todos los ancianos hay problemas de movilidad del tracto digestivo, dificultades al tragar, mayor cantidad de gases, así como aumento del estreñimiento. Rodríguez Chávez explicó que lo anterior se debe a que las secreciones del estómago disminuyen y por ello la acidez es menor, lo cual retrasa la digestión y es menor la absorción de las vitaminas y nutrientes.

Además, dijo, los problemas de la dentición y la disminución de la salivación condicionan una boca seca, que obliga a modificar el tipo de alimentos para que se puedan ingerir y tragar fácilmente.

Puede corregirse lo antes mencionado, expuso, al usar alimento más finamente cortado o picado, incluso llegando a nivel de licuado o con textura de papilla, conservando contenido de proteína en balance con grasa y carbohidratos.

Dio a conocer también que es frecuente que existan condicionantes en la alimentación por la disminución en la agudeza visual, el gusto y el olfato, lo cual puede dificultar que la oferta sea variada y equilibrada. Asimismo, detalló que los problemas psicológicos, como el aislamiento social y la existencia de una depresión, condicionan frecuentemente una anorexia o falta de ganas de comer.

Manifestó que existen otros problemas orgánicos, tales como la presencia de diabetes, hipertensión, problemas cardiacos, reumatismos, alteraciones hepáticas o cáncer.

También la asociación de pequeños problemas de salud que producen desequilibrios alimentarios, que en parte obedecen a malos hábitos alimenticios.

Manifestó que la alimentación en el adulto mayor debe de tener un contenido calórico suficiente, entre mil 900 y dos mil 100 calorías al día.

Debe haber un balance entre proteínas, grasas e hidratos de carbono (cárnicos-verduras-grasa) habituales en la alimentación, que al contener suficiente aporte de vitaminas y calcio fortalecen y preservan la salud.

Rodríguez Chávez exhortó a los derechohabientes del Instituto Mexicano del Seguro Social a acudir anualmente a los módulos de PrevenIMSS, ubicados en las Unidades de Medicina Familiar, para una orientación y atención oportuna de salud.

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