ZURICH, SUIZA.- El virus del Zika puede originar anticuerpos «buenos» y «malos», donde los primeros bloquean la infección, mientras que los segundos son los que pueden estallar en el organismo, después de contraer otro virus.
Este nuevo descubrimiento fue realizado por el grupo de investigadores dirigido por Davide Corti, del instituto de Investigación en Biomedicina (IRB) de Bellinzona, Suiza, según un estudio publicado en la revista especializada Science.
El resultado permite arribar por primera vez a una respuesta inmunitaria en los seres humanos al virus Zika y «hay tres principales conclusiones de nuestro trabajo», precisó Antonio Lanzavecchia, director del IRB.
La primera «es que hemos identificado los anticuerpos ‘buenos’ capaces de neutralizar y bloquear el virus no solo en probeta, sino también en los animales», indicó. Estos anticuerpos «superpotentes» representan un posible avance para la terapia del Zika, porque rápidamente eficaces, a diferencia de la vacuna que tiene una acción de profilaxis, y pueden ser usados también con fines preventivos en el caso de mujeres embarazadas que viven en el área del virus.
«Al cabo de sólo cuatro meses hemos seleccionado más de 100 anticuerpos monoclonales dirigidos contra el virus Zika, aislados de cuatro pacientes convalecientes», explicó Corti.
«El anticuerpo mas potente para neutralizar el virus Zika está ahora en fase de desarrollo para prevenir las infecciones congénitas», afirmó Corti.
El segundo resultado es que «hemos descubierto que existen también los ‘malos’ anticuerpos del Zika, que en aquellos que ya tienen la enfermedad -continuó Lanzavecchia- pueden aumentar y conducir a una infección letal en el caso de contraer el virus del dengue, similar a Zika». Se trata de una acción que funciona también a la inversa, es decir, los anticuerpos desarrollados en los que contrajeron el dengue podrían aumentar la gravedad del Zika.
«Una particularidad esta -relevó Lanzavecchia- que encontramos sólo en estos dos virus, muy similares entre ellos».
Desde aquí se llega al tercer descubrimiento, importante para el diagnóstico: Los investigadores identificaron anticuerpos para hacer pruebas de detección e identificar si en el pasado alguien estuvo enfermo de dengue o de Zika. Esta diagnóstico es importante para aquellas personas que ya han contraído uno de los dos virus, así como para determinar la incidencia real de las infecciones congénitas en zonas endémicas de infecciones Zika.
El virus del Zika es un virus del género Flavivirus, de la familia Flaviviridae, que se transmite por la picadura de mosquitos vectores del género Aedes.
En los seres humanos produce una enfermedad que se conoce desde la década de 1950 como proveniente de la región ecuatorial que abarca de África a Asia. Su nombre proviene del bosque Zika, cerca de Entebbe (Uganda), donde se aisló por primera vez este virus, en 1947.
En 2014 el virus se propagó al este a través del océano Pacífico hacia la Polinesia Francesa, y después hacia la Isla de Pascua para llegar en 2015 y 2016 a América Central, el Caribe y América del Sur, donde el brote epidémico del Zika ha alcanzado niveles pandémicos.
Está comprobado un vínculo entre la fiebre del Zika y la microcefalia en recién nacidos de madres infectadas.
jcrh