QUERÉTARO, QUERÉTARO.- Con el objetivo de fomentar en la población el consumo de fibra de malta en la población, estudiantes de la Facultad de Química de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ) desarrollaron botanas y bebidas con este ingrediente.
Un primer producto de este proyecto es Malto tops, totopos elaborados con harina de malta y maíz.
Los cuales se espera se coloquen como una alternativa saludable ante las «botanas chatarra» que hoy en día se encuentran en el mercado, las cuales tienen altos contenidos de sodio y grasas, que lo único que abonan, es el incremento de la obesidad y el sobre peso.
De ahí que Malto tops se presente como una alternativa mucho más saludable que aporte fibra, proteínas y otros componentes a la dieta del consumidor.
En Querétaro existen 16 empresas productoras de cerveza artesanal, que emplean malta, por lo que los residuos que deja su producción, que son aprovechados por estas estudiantes, representa una alternativa para impulsar una nueva industria y con ello alternativas de empleo.
Hay que destacar que Malto tops, es un producto se apega a la Norma Oficial Mexicana NOM-187-SSA1/SCFI-2002, que es la indicada para las masas, tortillas, tostadas y harinas preparadas.
Malto tops son elaborados por las estudiantes Karina Landaverde Mejía, Andrea León Pérez, Cinthya Isabel Ochoa Contreras, María Fernanda Ruiz Villaseñor y Diana Espinoza Cruz, con la asesoría de la docente investigadora de la Facultad de Química Marcela Gaytán Martínez y la profesora investigadora del Laboratorio de Fisiología y Bioquímica Poscosecha, del Departamento de Investigación y Posgrado en Alimentos de la Facultad de Química de la UAQ, María Estela Vázquez Barrios.
El segundo proyecto llevado a cabo por estas jóvenes. es una bebida gasificada de sabores fresa y piña llamada Bene Fiber, elaborada por los estudiantes Maricarmen Cordero Moreno, Mercedes Sarahí Doroteo Hernández, Diana Graciela Rojo González y Luis Fernando Castro Martínez, cuya innovación es la incorporación de inulina, un polisacárido no digerible por las enzimas del tracto gastrointestinal que actúa como una fibra soluble.
Este producto surgió ante el alto consumo de refrescos en el país y la necesidad del consumo de fibra en la población, donde los índices de enfermedades cardiovasculares y obesidad son la constante.
“La inulina es una fibra soluble, tiene la capacidad de favorecer el desarrollo de bacterias benéficas especialmente de bifidobacterias que son asociadas a la buena digestión. También disminuye enfermedades como las cardiovasculares, diverticulosis, disminuye el azúcar en sangre, incluso los niveles de colesterol”, destacan.
De ahí que la meta de este proyecto, sea ofrecer una bebida funcional accesible a los consumidores, principalmente niños y jóvenes.
“Se trata de una bebida gasificada que además es baja en calorías —pues está endulzada con stevia y sucralosa (C12H19Cl3O8)—, que con su cantidad de fibra soluble, que es aproximadamente 30 por ciento en cada botella de 500 mililitros, promueve la generación de bifidobacterias en el intestino”, agregan.
La profesora investigadora del Laboratorio de Fisiología y Bioquímica Poscosecha, del Departamento de Investigación y Posgrado en Alimentos de la Facultad de Química de la UAQ, María Estela Vázquez Barrios, detalló que en los próximos meses se harán los trabajos de gestión en la universidad para que ambos productos sean apoyados a través del Fondo de Proyectos Especiales de Rectoría (Foper) para su producción y puesta en venta en la tienda y el mercado universitarios de la institución.
con información de la Universidad Autónoma de Querétaro
jcrh