CALIFORNIA, ESTADOS UNIDOS.-Se llama Chem-Phys, es del tamaño de un parche o una curita, y es capaz de monitorear tanto las señales eléctricas como las bioquímicas en el cuerpo humano, tal como lo haría un electrocardiograma, además hace un seguimiento en tiempo real del lactato, una biosustancia que es un marcador del esfuerzo físico.
Es el resultado del esfuerzo Patrick Mercier, Amay Bandodkar y Joseph Wang, investigadores de la Universidad de California en San Diego, Estados Unidos.
El aparato puede ser llevado sobre el pecho y se comunica inalámbricamente con un teléfono inteligente, un reloj inteligente o un ordenador portátil. Podría tener una amplia gama de aplicaciones, desde ayudar a atletas a que supervisen su ejercicio físico, hasta ayudar a médicos que hagan lo propio con pacientes que sufren alguna enfermedad cardiaca.
El dispositivo incluye un conjunto flexible de sensores y una pequeña placa de circuitos. También puede transmitir los datos de las señales bioquímicas y eléctricas a través de Bluetooth.
La mayoría de los aparatos comerciales de este tipo que se pueden llevar puestos encima miden solo una clase de señal, como los pasos que da la persona o su ritmo cardiaco. Casi ninguno de ellos mide señales químicas, como el lactato.
jcrh