CIUDAD DE MÉXICO,- El Instituto Mexicano del Seguro Social sufre la pesada carga económica que la diabetes significa para la institución al representar el 53 por ciento de todo el gasto financiero del 2015 destinado a los seis principales padecimientos crónico-degenerativos, con una erogación de 43 mil 718 millones de pesos reales de este año.
Esto significó un alza de ocho por ciento anual, con respecto a los cerca de 40 mil 528 millones de pesos gastados en 2014, de acuerdo con el Informe al Ejecutivo Federal y al Congreso de la Unión ante la situación financiera del IMSS.
Expertos expresan que la carga financiera no sólo es para el IMSS, sino para la economía en su conjunto. De los casi 44 mil millones de pesos gastados en este padecimiento en 2015, 41 mil 112 millones fueron por erogaciones de pacientes ambulatorios y 2 mil 606 fueron gastos hospitalarios.
Lo anterior implica que el Instituto gastó un promedio de 16 mil 449 pesos reales durante el año pasado por cada paciente con diabetes, cifra que en el 2015 ascendió a 2 millones 657 mil 722 personas.
“En el IMSS las enfermedades crónico-degenerativas demandan 75 por ciento de la atención del Instituto y se encuentran concentradas en la población con 60 años y más. Se estima que el costo total de la diabetes en México asciende a 7 mil 700 millones de dólares al año, de acuerdo con Instituto Nacional de Salud Pública.
El IMSS prevé que el gasto médico sólo por consultas relacionadas con las diabetes se quintuplicará al pasar de 7 mil millones de pesos en 2013 a 37 mil 700 millones de pesos en 2050. El peligro.México tiene la prevalencia más alta de diabetes y es el segundo país con mayor porcentaje de obesidad de los miembros de la OCDE
Esto implica un gasto de 79 mil millones de pesos anuales, los cuales se destinan al tratamiento y atención de diabetes mellitus, hipertensión arterial, insuficiencia renal, cáncer cérvico-uterino y de mama”, dijo el IMSS en su reporte.
Expertos expresan que la carga financiera no sólo es para el IMSS, sino para la economía en su conjunto, aseguró Fátima Masse, del Instituto Mexicano de la Competitividad (IMCO).
“Nosotros calculamos todas estas pérdidas o costos sociales en 85 mil millones de pesos cada año, dentro de los cuales 70 por ciento corresponde a gastos de tratamiento médico y el otro 30 por ciento son pérdidas de productividad por muerte prematura y ausentismo laboral”, dijo Masse.De esos 85 mil millones de pesos, 12 mil millones corresponden a ausentismo laboral, un 15 por ciento.
“Si nosotros traducimos estas pérdidas en horas laborables vemos que estos 12 mil millones de pesos equivalen a 400 millones de horas laborables”, precisó la investigadora. El año pasado casi 40 por ciento de los pacientes que atendió el IMSS de las seis principales enfermedades crónico-degenerativas fueron diabéticos.
“De los poco más de siete millones de pacientes de enfermedades crónico-degenerativas, alrededor de 2.6 millones fueron pacientes diabéticos”, reveló el IMSS en su reporte.
Añadió que la mayor parte de los diabéticos, el 98 por ciento, son atendidos por su médico familiar, a través de atención regular basada en el tratamiento con medicamentos y algunas acciones sobre alimentación y actividad física.
Sin embargo, México aún no toca fondo pues el IMSS estima que el gasto médico sólo por consultas relacionadas con la diabetes se quintuplicará al pasar de 7 mil millones de pesos en 2013 a 37 mil 700 millones de pesos en 2050. Incluso, un estudio de la Coparmex identificó que las personas con esta enfermedad suelen ausentarse hasta 30 por ciento de sus días laborales.
Y es que a nivel internacional México es ‘campeón’ en diabetes pues su prevalencia en los tres grupos de edades en los que se mide es más alta que en cualquier país de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
Así, esta enfermedad cuenta con una prevalencia de más del 30 por ciento entre las personas de entre 60 y 79 años; de 24 por ciento entre 40 y 59 años y de seis por ciento entre personas que tienen de 20 a 39 años cuando el promedio de la OCDE es de 20, nueve y dos por ciento, respectivamente, según un estudio publicado por el organismo.
Detrás de esta cifra se encuentra la mala alimentación, pues al igual de mantener récord de diabetes, México cuenta con la tasa de obsesos más alta del organismo. El IMSS estima que el gasto médico sólo por consultas relacionadas con las diabetes se quintuplicará al pasar de 7 mil millones de pesos en 2013 a 37 mil 700 millones de pesos en 2050.
Además, el estudio de Morgan Stanley “The bitter aftertaste of sugar” consigna que la economía de México pierde 0.7 puntos porcentuales de crecimiento cada año por mantener las tasas de consumo de azúcar que hoy tiene el país. El impacto principal es sobre la productividad, que crecería 2.2 por ciento cada año, pero debido a este flagelo, sólo lo hará en 1.8 por ciento durante las próximas dos décadas.
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