FLORIDA, ESTADOS UNIDOS.- El huracán Matthew, la tormenta más poderosa que ha golpeado el Caribe en casi una década, azotaba Bahamas el jueves temprano en su avance hacia la costa sureste de Estados Unidos, donde millones de personas acataban las advertencias de las autoridades y buscaban refugio.
Las carreteras de Florida, Georgia y Carolina del Norte y del Sur estaban congestionadas y los suministros escaseaban en las estaciones de servicio y tiendas de alimentos antes de la llegada del huracán, que aceleró su paso durante la noche con vientos sostenidos de unos 205 kilómetros por hora y fuertes lluvias.
Matthew, que causó la muerte de al menos 39 personas en el Caribe y severos daños en el sur de Haití, tendría una fuerza en la escala de huracanes Saffir-Simpson de entre 3 y 4 en su curso hacia el este del estado de Florida, donde según el Centro Nacional de Huracanes (CNH) de Estados Unidos tocaría tierra el jueves por la noche.
Todos en nuestro estado deben prepararse ahora para un impacto directo», dijo el miércoles el gobernador de Florida, Rick Scott, en una conferencia de prensa en Tallahassee. «Si Matthew golpea directamente a Florida, la destrucción podría ser catastrófica y hay que estar preparados», agregó.
Los cuatro estados en la trayectoria del huracán declararon emergencia, lo que permitirá a sus gobernadores movilizar a la Guardia Nacional.
Refugios en Florida, Georgia y Carolina del Sur abrieron sus puertas después de que las autoridades locales, junto con el presidente Barack Obama, instaron a las personas a evacuar sus hogares.
Equipos federales de respuesta a las emergencias en los cuatro estados estaban coordinando los esfuerzos con funcionarios y reunían suministros, dijo Obama.
El gobernador Scott, en tanto, solicitó que Obama declare una emergencia antes de que el huracán toque tierra en Florida, lo que aumentaría recursos como alimentos y agua y duplicaría la fuerza de la Guardia Nacional activa a 3.000 efectivos.
Las escuelas y los aeropuertos de la región estaban cerrados el jueves y algunos hospitales evacuaron a sus pacientes, informaron medios locales. En tanto, cientos de vuelos fueron cancelados desde y hacia Miami, Fort Lauderdale y Orlando, en Florida, dijo el sitio web Flightaware.com el jueves temprano.
con información de Notimex
jrch