CIUDAD DEL VATICANO.- Este domingo, el Papa Francisco llevó a cabo una misa especial, la cual contó con la presencia de presos de varios lugares del mundo. Durante la misma, el pontífice hizo un llamado a una sociedad que ponga más esperanza en la rehabilitación, que mejore las condiciones en las cárceles y se incline a la clemencia.
Se olvida que todos somos pecadores y, muchas veces, somos prisioneros sin darnos cuenta. Cuando se permanece encerrado en los propios prejuicios, o se es esclavo de los ídolos de un falso bienestar, cuando uno se mueve dentro de esquemas ideológicos o absolutiza leyes de mercado que aplastan a las personas», dijo en su homilía.
Francisco, quien a menudo critica las consecuencias de un capitalismo desbocado, dijo además que quienes veneran las leyes de los mercados financieros son prisioneros de sus propias ideologías porque los mercados suelen castigar a los más débiles en la sociedad.
El Vaticano informó que unos 1.000 presos participaron de la misa en la Basílica de San Pedro. La mayoría llegó desde cárceles italianas, aunque muchos eran extranjeros, pero hubo también delegaciones de unos 10 países.
Los condenados fueron acompañados por otras 3.000 personas entre capellanes, guardias, ex prisioneros y familiares, quienes acudieron como parte del año del Jubileo de la Misericordia de la Iglesia Católica, que termina este mes.
En la ceremonia participaron dos mafiosos que cumplen penas de confinamiento solitario para miembros del crimen organizado, dijeron funcionarios del Vaticano.
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