MIAMI, ESTADOS UNIDOS.- Contra todo pronóstico, Donald Trump, presidente electo de Estados Unidos y el magnate mexicano Carlos Slim, se reunieron para cenar.
Esto, de acuerdo a informes de Arturo Elías Ayub, director de Alianzas Estratégicas y Contenidos de América Móvil y yerno del empresario.
Por medio de su cuenta de Twitter, Elías Ayub indicó que Trump “tuvo la amabilidad de invitar al Ing. Carlos Slim a una cena muy cordial, con un muy buen ánimo para México y los Mexicanos”.
El encuentro entre ambos magnates, tuvo lugar en el complejo Mar-a-Lago en Florida, propiedad del presidente electo de Estados Unidos. Según señala The Washington Post, la cena tuvo lugar el pasado sábado.
«Fue una cena muy cordial y sí quedó el ingeniero con un sabor de boca muy positivo hacia la relación con México», dijo a la agencia de noticias Reuters vía telefónica Elías Ayub.
Tras el encuentro, Trump describió su visita con Slim como “una cena encantadora con un hombre maravilloso”.
La reunión Trump-Slim constituye un viraje en la relación entre ambos hombres de negocios, quienes se criticaron mutuamente durante la campaña electoral de Estados Unidos.
Recordemos que a mediados del pasado octubre, Trump acusó a Slim, el mayor accionista del diario The New York Times, de montar un complot mediático en su contra encabezado por el periódico, que publicó relatos de mujeres que acusaban al magnate neoyorquino de manosearlas y besarlas años atrás sin su consentimiento.
En su momento, Elías Ayub dijo que al multimillonario mexicano «no le interesa en lo más mínimo la vida personal» de Trump, pero a pocos días de los comicios lanzó una crítica contra las posturas proteccionistas que llevaron al empresario inmobiliario de 70 años a la Casa Blanca.
Trump ha planteado la posible salida de Estados Unidos del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, que integra con México y Canadá, el bloqueo de remesas y la implementación de aranceles.
Slim subrayó que Estados Unidos «importa bienes de consumo de todo el mundo» y si Trump llegara a gravarlas con un impuesto estimado en 35%, «todas las compras aumentan un 15% o 20%, destrozaría la economía estadunidense con una inflación brutal».
con información de agencias
jcrh