ESTADOS UNIDOS.- Michelle Obama, primera dama de Estados Unidos, sale «al quite» de Hillary Clinton, candidata presidencial demócrata, quien tuvo que suspender su campaña, debido a que padece neumonía. De esta forma, encabezará este viernes, un acto político en Virginia, en el cual se espera que haga un llamado a los ciudadanos, para que participen de la votación anticipada (vía correo) y que lo hagan por Hillary.
El objetivo del gobierno es convencer a la mayor cantidad posible de personas para que vayan a votar, en particular la comunidad afro-estadounidense y los más jóvenes, más proclives a apoyar a Hillary que al candidato republicano Donald Trump
De acuerdo con el New York Times, la fuerza de la primera dama radica en la gran popularidad que tiene (inclusive superior a la de su esposo, el presidente Barack Obama), y la reputación que ganó en los últimos años, que pasó de ser «una esposa que rechazaba el rol de figura pública» a convertirse en un actor político de alta reputación.
Una popularidad y reputación que le faltan a Hillary, subrayó el New York Times.
Un sondeo de opinión reciente reveló que, tanto Hillary como Trump, son los «peores candidatos presidenciales de los últimos 40 años». Hillary, que el domingo pasado sufrió un «episodio médico» durante la ceremonia por el aniversario del 11 de setiembre en Ground Zero, retomará probablemente su campaña electoral el jueves próximo.
El domingo pasado Hillary debió retirarse repentinamente de la ceremonia por los 15 años del atentado contra las Torres Gemelas en Nueva York. Ayer, en una entrevista con CNN, explicó que se sintió mareada pero que en ningún momento perdió la conciencia cuando pareció tropezarse al subir a su camioneta.
«Sentí un mareo y perdí el equilibrio por un instante, pero una vez que subí (a un automóvil), una vez que pude sentarme y ponerme a resguardo del calor, una vez que bebí agua, inmediatamente me sentí mejor», dijo Hillary en una entrevista con el programa «Anderson Cooper 360» de la cadena CNN. Hillary, de 68 años, reveló además que no dio a conocer públicamente que había sido diagnosticada con neumonía, porque «simplemente no pensó que iba a ser la gran cosa».
La exprimera dama dijo que su médico le había recomendado descansar por al menos cinco días, pero que ella no siguió «ese sabio consejo».