BOGOTÁ, COLOMBIA.- El nuevo Acuerdo de Paz entre el gobierno y las rebeldes Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) será firmado el próximo jueves en Bogotá.
Hemos acordado firmar el Acuerdo Final para la Terminación del Conflicto y la Construcción de una Paz Estable y Duradera el próximo jueves 24 de noviembre a las 11:00 horas en el Teatro Colón de Bogotá”, se dio a conocer por medio de un documento enviado a la prensa.
Contrario a lo ocurrido con el acuerdo anterior, que fue rechazado de manera sorpresiva en el referéndum del pasado 2 de octubre, el nuevo pacto será refrendado solo por el Congreso.
“Las delegaciones acordamos que el mecanismo de refrendación de este Acuerdo será a través del Congreso de la República y estamos precisando los procedimientos que se van a utilizar para este propósito”, explicaron el gobierno y las FARC.
Agregaron que “la consolidación de la paz requiere que avancemos con paso firme hacia la implementación de los acuerdos que permitan superar tantos años de conflicto en Colombia”.
La firma del nuevo acuerdo se realizará después de que el gobierno intentó por última vez convencer a los opositores, encabezados por los expresidentes Álvaro Uribe y Misael Pastrana, de las “bondades” del segundo texto que contiene las propuestas que ellos formularon.
Entre ellas destaca el uso de los recursos de las FARC para reparar a las víctimas, para lo cual tendrán que entregar un inventario de bienes y activos.
Además, quedó claro que “no hay ideología de género, lo que hay es enfoque de género para dar prioridad a la atención de las mujeres víctimas del conflicto y reconocer su papel como constructoras de paz”, explicó el jefe negociador del gobierno, Humberto de La Calle.
Aseguró que el acuerdo reitera la libertad de culto y garantiza el derecho a la propiedad privada. Además, fueron incluidas las organizaciones de víctimas en la Unidad de Búsqueda de Personas Desaparecidas.
“Sobre narcotráfico, los que vayan a la Jurisdicción de Paz deben entregar toda la información detallada para que se puedan establecer responsabilidades”, precisó el negociador oficial.
Por otra parte, se excluyó explícitamente a las FARC “de la posibilidad de presentar candidatos en las circunscripciones especiales para la paz”.
Asimismo, “se redujo la financiación del partido que surja de las FARC. Se redujeron las emisoras, que se compartirán con las víctimas y las comunidades”.
En la reunión con los expresidentes, el gobierno de Santos “propuso buscar un acuerdo político nacional, recogiendo la idea del expresidente Uribe. Consideramos que un pacto de esta naturaleza permitiría avanzar por consenso en la implementación del acuerdo, de manera concertada con los voceros del ‘No’”.