MÉXICO.- A partir del 1 de enero de 2017, se tiene pactado que el precio de la gasolina suba un 15 por ciento.

De esta forma, la Magna podría pasar de 13.98 a 16.07 pesos,  la Premium de 14.81 a 17.03 pesos y el Diesel de 14.63 pesos a 16.82 pesos por litro.

Mucha gente se pregunta, ¿por qué los precios se van a incrementar, cuando con la consabida Reforma Energética la gran promesa era precisamente lo contrario?

Antes que nada hay que destacar que con la Reforma Energética se plasmaron sobre papel las condiciones para que el mercado mexicano de la gasolina sea más competitivo y en consecuencia los precios también lo sean, pero en la práctica estas condiciones no se han materializado.

Se espera y se supone que además de Pemex, más empresas tengan la posibilidad de producir, importar, transportar, distribuir y vender gasolina. En teoría, esto debería posibilitar precios más competitivos.

Sin embargo es que pese a esta supuesta «apertura», Petróleos Mexicanos sigue siendo propietaria de las únicas seis refinerías que existen en el país. Lo mismo de los ductos que transportan y distribuyen los combustibles.

Así que en realidad, no existe la tan anunciada competencia en este mercado. Ahora bien, en términos generales, ¿por qué va a subir el precio de los combustibles?

La Secretaría de Hacienda decidió adelantar un año la liberalización de precios en el mercado de gasolinas, debido a que el interés de las empresas privadas por importar este combustible no fue el esperado porque la fijación de precios seguía en manos de la dependencia.

Al abrir el mercado, los precios ahora dependerán de cuatro factores: tipo de cambio, precio del petróleo, impuestos y costo de la logística (producción, transportación, almacenamiento y distribución).

El detalle es que este proceso no arrancará al mismo tiempo en todo el país y se está dando sin que haya verdadera competencia en el mercado de la gasolina, con el peso atravesando por una fuerte depreciación y los precios del petróleo recuperándose. En consecuencia la gasolina será más cara.

Por el momento los únicos estados donde el mercado será abierto por completo y los precios no dependerán de ninguna manera del gobierno serán Sonora y Baja California, para el resto del país la Secretaría de Hacienda dará a conocer a finales de este mes la metodología para fijar el precio máximo de la gasolina para el próximo año.

Se espera que antes de que termine el año, la Comisión Reguladora de Energía (CRE) también dará a conocer el calendario de cómo se irá liberando el mercado por estados.

Mientras tanto, en gran parte de 2017, habrá dos precios para la gasolina; el que se pague en los estados ya liberalizados y el del resto del país.

En teoría, a finales del año que viene el país deberá estar liberalizado por completo.

Cuando eso suceda a lo largo del país encontraremos precios diferentes y aquellos estados que estén más cerca del mar o de alguna refinería tendrán los menores precios, debido a que los costos de transporte del combustible también serán menores.

con información de agencias

jcrh